El autobronceador, una alternativa saludable

El autobronceador se ha consolidado desde hace tiempo como una alternativa saludable para broncearse. Te enseñamos sus características de acuerdo con los expertos.

Revisado y aprobado por el médico Diego Pereira.

Escrito por Josberth Johan Benitez Colmenares

Última actualización: 25 marzo, 2023

El autobronceador, también conocido como bronceado sin sol, bronceado en aerosol o bronceado falso ha cobrado gran popularidad los últimos años. Se trata de una alternativa saludable en contraste con otros métodos como el uso de camas solares y la exposición directa a los rayos del sol. Te enseñamos cómo funciona, sus características y algunas consideraciones sobre su uso.

Aunque el uso del autobronceador no es reciente, lo cierto es que la industria cosmética lo ha rescatado durante la última década. En general, existe mucha desinformación la técnica; lo que puede derivar en problemas graves en la piel. Con el animo de que te informes apropiadamente revisamos qué dicen los expertos sobre él y su seguridad.

¿Qué es el autobronceador?

El bronceado sin sol es una alternativa al bronceado UV. Los agentes de bronceado sin sol que se comercializan en la actualidad lo hacen principalmente en formato de aerosol y de lociones. Los productos ofrecen un bronceado sin exposición a los rayos UV de la mano de una sustancia llamada dihidroxiacetona (DHA).

Tal y como señalan los investigadores, la dihidroxiacetona es un azúcar incoloro de origen vegetal que interactúa con las células muertas de la superficie de la epidermis para teñir la piel. Las concentraciones más bajas de DHA producen manchas en la piel más claras, mientras que las concentraciones más altas producen manchas oscuras. Como consecuencia se genera un bronceado falso en cualquier tipo de piel.

La Food and Drug Administration (FDA) aprobó la DHA como un aditivo de color para cosméticos en 1973. Es importar recordar que este aditivo no tiene funciones de bloqueador solar. En promedio, el factor de protección de los productos de este tipo oscila entre 3 y 4. Por tanto, quien utiliza un autobronceador debe aplicarse luego bloqueador solar y minimizar igualmente la exposición directa al sol.

La DHA no es el único aditivo que se utiliza en los productos autobronceadores. Aunque es cierto que es el más popular, también encontramos otros cuyos ingredientes principales son el licopeno, el betacaroteno, la cantaxantina, la tirosina y muchos otros. No todos están respaldados por las agencias sanitarias. Por ejemplo, la hormona estimulante de los melanocitos alfa (distribuido a veces como Melanotan ®) está prohibido en muchas jurisdicciones. Aún así, se vende como un producto bronceador.

¿El bronceado sin sol es seguro?

En general, el bronceado sin sol es seguro. Lo es al menos cuando los aditivos añadidos en los productos cuentan con el aval de las organizaciones sanitarias. Dado que la dihidroxiacetona es el compuesto más utilizado nos concentramos en los estudios que avalan sobre su seguridad.

Un estudio publicado en Photochemistry and Photobiology en 2009 encontró que el DHA concentrada al 9 % podría atenuar la formación de vitamina D inducida por la luz solar. Los productos con este aditivo suelen comercializarse entre el 3 % y el 5 %. Sin embargo, la inclinación por un bronceado rápido o permanente de algunas personas pueden llevarlos a buscar presentaciones con una mayor concentración del aditivo. Esta es una consecuencia directa en estos casos.

Otros investigadores han encontrado que el uso a largo plazo del aditivo induce daño en el ADN, bloqueo del ciclo celular y apoptosis en queratinocitos. También existe evidencia de que un abuso de los productos conduce a la formación de radicales libres. Como consecuencia, se puede comprometer la estructura celular, promover el envejecimiento prematuro de la piel y degradar el colágeno.

Ten en cuenta que estos efectos secundarios se originan ante el uso inadecuado del autobronceador. Si sigues las indicaciones del fabricante y optas por concentraciones que no superen el 5 % de DHA no deberías tener mayores problemas. Recuerda que el bronceado es temporal, y en función del tipo de piel y los hábitos puede durar desde un par de horas hasta un par de días.

¿Cómo utilizar un autobronceador?

Las indicaciones sobre cómo usar un autobronceador se incluyen en la etiqueta del fabricante. Sin embargo, para que aproveches al máximo sus efectos conviene que tengas en cuenta algunas recomendaciones básicas. Te dejamos con las que ofrece la Academia Estadounidense de Dermatología (AAD):

• Exfolia la piel antes: se aconseja aplicar un producto exfoliante o toallitas a través de la superficie de la piel. Concéntrate especialmente en las áreas donde la piel es más gruesa, como por ejemplo los codos y las rodillas.
• Seca la piel: para que el producto se extienda de manera uniforme seca la piel con una toalla. Esto también garantiza que se adhiera a esta.
• Aplica el producto por tramos: así te garantizas de cubrir toda la superficie sin dejar espacios vacíos. Hazlo por medio de movimientos circulares y suaves.
• Extiende el producto: un error común es concentrase solo en las áreas visibles del cuerpo. Asegúrate de aplicarlo también en los pies, las muñecas, la espalda y las axilas. Así garantizas un broceado más natural.
• Aplica más en la piel gruesa: ya que estas requieren un poco más que otras. La piel de los tobillos, las rodillas y los codos deben ser prioridad.
• Espera a que el producto se seque: otro error frecuente es vestirse y salir a la calle inmediatamente después de utilizar autobronceador. Como mínimo, aguarda 10 minutos y utiliza ropa holgada y evita la sudoración o la exposición al agua.
• Utiliza protector solar: el producto no sustituye el uso de protector solar. Si saldrás al exterior debes aplicarlo siempre.

Para finalizar te recomendamos apostar solo por aquellos productos que cuentan con reputación en el mercado. Encontrarás cientos y cientos de marcas, algunas de ellas mejores que otras. Evita de igual modo exceder las recomendaciones de uso o utilizarlo de forma permanente.