Ojo seco: síntomas y consejos para aliviar el malestar

El síndrome del ojo seco es bastante común en la población, pero son pocas las personas que saben cómo aliviar los síntomas de forma eficaz.
Ojo seco: síntomas y consejos para aliviar el malestar
Laura Herrera

Escrito y verificado por la médica Laura Herrera.

Última actualización: 19 agosto, 2023

El ojo seco se genera por una alteración de las lágrimas, las cuales cumplen la función de protección y lubricación de este órgano en condiciones normales.

En esta entidad, las lágrimas pueden estar disminuidas en cantidad (deficiencia) o calidad (son inestables y se evaporan con rapidez), ocasionando síntomas oculares y, en casos severos, puede generar lesiones en la superficie del ojo, lo cual puede conllevar alteraciones permanentes de la visión.

El síndrome de ojo seco afecta hasta a la mitad de la población, de acuerdo con un artículo publicado en la revista The Ocular Surface. Tiene múltiples causas, entre las que se incluyen la edad, la exposición a la luz solar y a pantallas, la contaminación ambiental, las infecciones e incluso algunos medicamentos. Además, puede estar asociado con enfermedades autoinmunes como el síndrome de Sjögren.

Síntomas del ojo seco

Una persona con esta enfermedad puede experimentar uno o varios síntomas oculares, siendo la sensación de cuerpo extraño uno de los más comunes, según la Revista de la Facultad de Medicina. También se han descrito otros malestares como:

  • sensación de sequedad o ardor,
  • molestia con la luz,
  • picazón,
  • lagrimeo excesivo,
  • ojo rojo,
  • visión borrosa.


Diagnóstico del ojo seco

Al generar síntomas que se pueden presentar con frecuencia en otras enfermedades, es importante consultar al médico para determinar la causa específica de la misma.

El profesional realizará una historia clínica completa y un examen físico que permita establecer la lubricación del ojo o las lesiones asociadas por falta de ellas. Es el caso de las úlceras corneanas, efectuando una valoración especial con una tinción del ojo con fluoresceína.

A partir de los hallazgos, el oftalmólogo puede diagnosticar con mayor precisión si se trata de esta patología u otras alteraciones de la superficie ocular.



Recomendaciones generales para el alivio de los síntomas del ojo seco

Existen diversas recomendaciones para aliviar los síntomas del ojo seco, las cuales fueron abordadas en un artículo publicado en Turkish Journal of Ophthalmology. Veámoslos en detalle:

  • Utilizar lágrimas artificiales varias veces al día con la finalidad de reemplazar la función de las lágrimas naturales.
  • Aplicar compresas tibias en los párpados ayuda a preservar la función de las glándulas de Meibomio, que producen una porción oleosa para evitar la rápida evaporación de las lágrimas.
  • Consumir suplementos o alimentos ricos en ácidos grasos omega 3, betacarotenos, antioxidantes, zinc y lactoferrina puede mejorar la calidad y cantidad de lágrimas producidas.
  • Descansar con frecuencia de las pantallas. Para ello, existe la regla 20-20-20, la cual sugiere cada 20 minutos mirar un objeto a 20 pies durante 20 segundos.
  • Utilizar gafas protectoras para disminuir la exposición al aire acondicionado, el humo, el polvo, los rayos ultravioleta, el viento y otros factores ambientales.
  • Consultar al médico es crucial porque estos síntomas pueden ser explicados por otras alteraciones oculares. Además, en algunos casos puede requerirse tratamiento antibiótico, antiinflamatorios e incluso manejo quirúrgico.

Siempre se requiere valoración médica

El ojo seco es una afección ocular que afecta a un gran número de personas en todo el mundo. La falta de lágrimas adecuadas para lubricar los ojos puede provocar irritación, picazón, enrojecimiento y sensibilidad a la luz.

Dado que esta condición puede aumentar el riesgo de infecciones y daño a la superficie ocular a largo plazo, generando alteración de la agudeza visual en ocasiones irreversible, es necesaria una valoración médica para un diagnóstico oportuno y tratamiento apropiado según el caso.




Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.