Causas y factores de riesgo de las arritmias cardíacas

Las causas de las arritmias cardíacas son muy variadas. En muchos casos es posible identificarlas, pero en algunos no lo es. Por ello mismo resulta indispensable el chequeo médico.

Revisado y aprobado por el médico Diego Pereira.

Escrito por Maite Córdova Vena

Última actualización: 31 mayo, 2021

Las causas y factores de riesgo de las arritmias cardíacas son tan variadas como la gravedad y las consecuencias clínicas de las mismas. Por ello mismo, existen diversas maneras de clasificarlas.

A pesar de la diversidad de causas que existen, los expertos han encontrado que a nivel celular, las arritmias comparten propiedades electrofisiológicas comunes. Asimismo, explican que existen 3 mecanismos principales detrás de las mismas: el automatismo, la actividad desencadenada y la reentrada.

En líneas generales, esto quiere decir que cuando el sistema eléctrico del corazón presenta dificultades para funcionar, las señales eléctricas toman rutas distintas a lo normal, o incluso se demoran o se bloquean. Por esto, cuando el corazón late demasiado rápido o demasiado lento, o de manera irregular, se habla de arritmias cardíacas.

Para poder brindar al paciente un diagnóstico y tratamiento adecuado, será fundamental diferenciar y comprender de qué mecanismo se trata.

Causas comunes de las arritmias cardíacas

Detrás de las arritmias pueden haber varias causas subyacentes, por ello mismo no siempre resulta fácil determinar cuál es su origen exacto. Aún así, se suelen tener en cuenta las siguientes que vamos a desarrollar a continuación.

Patologías previas

Enfermedades crónicas como la diabetes, la hipertensión y la apnea obstructiva del sueño pueden ser motivo de arritmias. También la enfermedad de las arterias coronarias y otros problemas cardíacos (congénitos), como puede ser una insuficiencia mitral.

Por otra parte, haber pasado por una cirugía cardíaca previa hace que la persona pueda ser más propensa a experimentar arritmias.

Además de la presión alta, cabe destacar que el consumo de medicamentos para la hipertensión arterial también puede provocar arritmias.

Insuficiencia cardíaca

Como indican los expertos de la Fundación Española del Corazón, “la insuficiencia cardiaca se produce cuando hay un desequilibrio entre la capacidad del corazón para bombear sangre y las necesidades del organismo”. Esto hace que el corazón pierda fuerza.

Niveles anormales de potasio en el cuerpo

Los desequilibrios electrolíticos en el organismo también pueden dar pie a las arritmias. En especial los desequilibrios de calcio, magnesio y potasio, que tienen un rol fundamental en el sistema cardiovascular.

Idiopática

Las arritmias que no tienen un origen claro -incluso tras haberlas investigado a profundidad- se incluyen en la categoría de “idiopáticas”.

De acuerdo con algunos especialistas, parece que estas podrían tener un origen genético. No obstante, también indican que es necesario continuar profundizando al respecto.

Factores de riesgo

Las arritmias se pueden manifestar tanto en personas sanas (de cualquier edad) como en personas que tengan una cardiopatía subyacente. Algunos factores de riesgo que pueden incidir en ello serían los siguientes:

• Obesidad.
• Tabaquismo.
• Sedentarismo.
• Deshidratación.
• Estrés o ansiedad.
• Problemas de tiroides.
• Consumo excesivo de alcohol o cafeína.
• Consumo de drogas ilegales.
• Algunos medicamentos y suplementos (como los medicamentos de venta libre para resfriados y alergias, fármacos para la depresión, antibióticos, etc.).
• Herencia genética: aumenta la propensión a sufrir arritmias.
• Envejecimiento: las personas pueden ser más propensas a experimentar arritmias en la tercera edad. Por esto mismo, muchas deben llevar marcapasos.

¿Cuándo consultar al médico?

Algunas arritmias remiten de manera espontánea, otras al atender la causa que las ha producido, y en otros casos las arritmias producen una afectación importante en la función cardíaca, pudiendo llegar a ser mortales. Por ende, ante cualquier molestia significativa (que se presente de forma regular o súbita), lo mejor es consultar con el médico en la brevedad posible.

No es recomendable ignorar el problema ni postergar la consulta durante mucho tiempo, ya que cuanto antes se reciba un diagnóstico y tratamiento acorde, mayor bienestar se podrá experimentar. Por otro lado, se recomienda mejorar los hábitos de vida.

En caso de notar: mareos, debilidad, falta de aliento, dolor en el pecho, desmayos o síncopes, y otros síntomas que te impidan hacer vida normal o te generen inquietud, será fundamental que solicites ayuda médica urgente.