Vaginitis: síntomas, causas y tratamientos

Mantener una buena higiene íntima, usar jabones sin perfumes y vestir ropa interior holgada son hábitos que ayudan a prevenir esta afección. Te mostramos otros detalles que debes conocer.
Vaginitis: síntomas, causas y tratamientos
Leonardo Biolatto

Revisado y aprobado por el médico Leonardo Biolatto.

Escrito por Daniela Andarcia

Última actualización: 28 septiembre, 2021

La vaginitis o vulvovaginitis es una afección común que se caracteriza por la inflamación en el área de la vagina. Puede producir secreción, dolor, ardor, picazón e incluso sangrado de la zona.

Se desarrolla con frecuencia debido a una infección por bacterias o por un cambio en el equilibrio normal de la flora vaginal. Aunque también puede ser causada por Trichomonas, un parásito. Un cultivo podría develar el origen de la vaginitis en la mujer y el tratamiento dependerá del agente causal.

Síntomas de la vaginitis

La vulvovaginitis puede afectar a la mujer a cualquier edad, incluso en la niñez. En general, los síntomas de esta afección son dolorosos e incómodos, por lo que debe ser tratada apenas aparezcan los primeros, en vistas a evitar complicaciones.

Dentro de los signos más comunes se encuentran los siguientes:

  • Irritación en el área genital.
  • Mal olor vaginal.
  • Picazón vaginal.
  • Dolor o malestar al orinar, conocido como disuria.
  • Dispareunia, que son relaciones sexuales dolorosas.
  • Sangrado vaginal.
  • Hinchazón, sensibilidad y enrojecimiento en el área de la vagina.
  • Urgencia de ir a orinar, incluso si son pequeñas cantidades.
  • Secreción espesa o acuosa y con un color que varía entre blanco, gris o verde.

Ten en cuenta que se entiende por vagina el canal muscular que inicia desde el cuello uterino hasta el exterior del cuerpo. Tiene una longitud de alrededor de 6 a 7 pulgadas. La vaginitis puede afectar a toda esa zona y hasta a los labios vaginales.

Urgencia miccional en una mujer con vaginitis.
La urgencia miccional puede ser un síntoma de vaginitis en la mujer y no de infección urinaria.

Causas

De acuerdo a un estudio publicado en American Family Physician, la vaginitis es una de las infecciones más comunes en los diagnósticos ginecológicos. El 90 % de los casos corresponden a la vaginitis infecciosa, es decir, vinculada a candidiasis, vaginosis bacteriana o tricomoniasis.

Esta afección también puede ser por gonorrea, por infección por Mycoplasma, por herpes o Clamidia, hasta la más rara colonización por Campylobacter. Por otro lado, podría desarrollarse por una abrasión o traumatismo en el área de la vagina que sirva como puerta de ingreso a los microorganismos patógenos.

Cuando hay sequedad vaginal, la zona es propensa a experimentar vulvovaginitis. Las niñas que están pasando la transición a la pubertad, así como las mujeres menopáusicas y posmenopáusicas son suceptibles a una reducción en la humedad de esta mucosa.

Así mismo, no hay que descartar la alergia a algún tipo de condón, espermicidas, a las duchas vaginales, un jabón en particular, un medicamento o un tampón. Dentro de los factores de riesgo se encuentran los siguientes:

  • Tomar antibióticos.
  • Estar embarazada.
  • Tener diabetes.
  • Usar duchas vaginales o aerosoles.
  • Tener bajos niveles de estrógenos (por una razón patológica o por una causa natural, como la menopausia).
  • Usar ropa interior o pantalones ajustados.

Ten en cuenta que la infección por ciertos hongos y la vaginosis bacteriana se expresan como vulvovaginitis, pero no se transmiten al tener relaciones sexuales. Sin embargo, las mujeres sexualmente activas son más propensas a desarrollar la afección.

Finalmente, existe evidencia científica de que las mujeres que tienen relaciones sexuales con múltiples parejas tienen mayor riesgo de presentar vaginitis bacteriana. De igual forma, tienen un 60 % más de riesgo de desarrollar vaginosis si la pareja sexual es femenina.

Algunos tipos de vaginitis

De acuerdo a las causas que estuvimos enumerando, podemos clasificar as las vaginitis en varios tipos. Las más relevantes en la clínica médica son las siguientes:

  • Vaginosis bacteriana: cuando se rompe el equilibrio de la flora normal y hay un exceso de ciertas cepas bacterianas en la vagina.
  • Atrofia vaginal: sucede cuando el revestimiento de la vagina se adelgaza a causa de la disminución de estrógenos. Suele ocurrir durante la menopausia.
  • Candidiasis: es causada por el hongo Candida albicans.
  • Trichomonas vaginalis: este parásito protozoario unicelular suele generar un flujo amarillento con un olor muy particular y característico.

Diagnóstico

Al acudir al médico es posible que te haga algunas preguntas de rutina. Se te solicitará información sobre tu historial sexual y sobre los síntomas que has tenido, si presentas ardor al orinar o si te duele cuando tiene relaciones. También es probable que te practique un examen físico pélvico y vaginal y te pida hacer una prueba de orina.

Todo esto es con el fin de evaluar si existen organismos infecciosos que expliquen los síntomas o si experimentas un cuadro inflamatorio sin infección. Así mismo, el médico puede tomar una muestra del flujo vaginal para estudiar los niveles de pH, el olor y la apariencia, culminando con un cultivo.

En caso de estar embarazada debes informar a tu médico, ya que la infección podría afectar al feto. Del mismo modo, la prescripción, de ser necesaria, debe hacerse con una receta de un medicamento que no afecte la gestación.

Vaginitis en el embarazo.
Una vaginitis en el embarazo puede ser un factor de riesgo para parto prematuro o para restricción del crecimiento intrauterino.

Tratamiento

El médico indicará el tratamiento dependiendo de la causa de la vulvovaginitis. Cuando la infección es por un hongo, es posible que se recete clotrimazol, por ejemplo. En caso de ser una vaginitis bacteriana se recomendarán antibióticos por vía oral o en forma de óvulos vaginales.

Para tratar la irritación severa, algunos profesionales indican cremas con corticoides. De todos modos, el uso de las mismas debe ser limitado en el tiempo. Si la inflamación se debe a una reacción de tipo alérgica se preferirán antihistamínicos. Y si la vaginitis es por los bajos niveles de estrógenos en el cuerpo, una crema tópica con la hormona podría ser suficiente.

Lo recomendable es que sigas las indicaciones del médico, las dosis prescritas y el tiempo recetado.

Prevención de la vaginitis

Puede que algunas medidas ayuden a prevenir la vulvovaginitis. Estas incluyen el hecho de mantener una buena higiene íntima, limpiar los genitales de adelante hacia atrás, usar jabones suaves y sin aromas, vestir ropa interior holgada y procurar utilizar preservativos durante las relaciones sexuales.




Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.