7 consejos para proteger la espalda del aire acondicionado

¿Sufres de dolor de espalda por el uso del aire acondicionado? No estás solo, ya que se trata de un problema muy común. Veamos 7 cosas que puedes hacer para evitarlo.
7 consejos para proteger la espalda del aire acondicionado
Diego Pereira

Revisado y aprobado por el médico Diego Pereira.

Última actualización: 30 septiembre, 2022

Rigidez en el cuello, dolor lumbar, tensión en los hombros e incluso molestias en los huesos. Todos estos son síntomas frecuentes ante la exposición prolongada al aire acondicionado. Los trabajadores de oficina suelen lidiar con ellos regularmente, aunque por fortuna hay varias maneras de hacer frente al problema. Te enseñamos 7 consejos para proteger la espalda del aire acondicionado.

7 recomendaciones para proteger la espalda del aire acondicionado

Los expertos han encontrado que la exposición a un ambiente frío en el trabajo se asocia con una mayor prevalencia de dolor musculoesquelético. No se conocen muy bien los motivos, aunque se sabe que el dolor puede ser peor en aquellos con enfermedades subyacentes.

Por ejemplo, los investigadores alertan que los pacientes con fibromialgia experimentan más dolor frente al descenso de la temperatura y otras variaciones climáticas. Además, el dolor musculoesquelético puede ser un síntoma más de un problema conocido como síndrome del edificio enfermo.

Este se caracteriza por dolor de cabeza, mareos, náuseas, irritación de ojos, en la nariz o garganta; tos seca, piel seca, dificultad para concentrarse; fatiga, sensibilidad a los olores, ronquera, alergias, resfriado y cambios en la personalidad. Con todo esto en mente, te dejamos con 7 consejos para proteger la espalda del aire acondicionado.

1. Regula la temperatura en un estándar saludable

Para proteger la espalda del aire acondicionado hay que apagarlo
Regular el uso del aire acondicionado tiene que convertirse en la norma tanto en el hogar como en la oficina.

La temperatura ideal del aire acondicionado oscila entre 23 y 24 °C. Mantenerlo dentro de este espectro no solo impedirá los dolores asociados a su uso prolongado, sino que también tiene repercusiones en la factura al final de mes. Pese a ello, y como advierten los expertos, los veranos cada vez más cálidos pueden llevar a las personas a ajustar su temperatura a un nivel inferior.

2. Evita la exposición directa

Es mucho más probable que desarrolles dolor de espalda por el aire acondicionado si estás muy cerca de él. Por tanto, evita la exposición directa y migra tu espacio de trabajo en caso de que así proceda. La tos seca, las alergias, los ojos secos y los calambres musculares pueden empeorar también por estar próximo a él. Mientras más lejos esté el equipo de ti, mejor.

3. Mejora la postura de la espalda

No puedes derivar toda la responsabilidad del dolor de espalda al aire acondicionado. Si pasas mucho tiempo frente a un ordenador, sentado o de pie, debes cuidar la postura para evitar la tensión muscular. Después de todo, el aire acondicionado no hace más que empeorar un problema que ya está presente. Te dejamos con algunos consejos para mejorar la postura de la espalda que puedes aplicar para ello.

4. Alterna su uso con el aire exterior

Otra de las formas de proteger la espalda del aire acondicionado es alternar su uso con el aire exterior. Esto es, apagar el sistema de manera regular a lo largo del día y abrir las ventanas o esperar a que el clima de la habitación demande de nuevo su encendido. Abrir ventanas puede ser útil para promover la circulación del aire y de las partículas, lo que reduce los alérgenos expulsados de los filtros del equipo.

5. Considera utilizar sustitutos

Para proteger la espalda del aire acondicionado hay que usar ventilador
A pesar de que el aire del ventilador no es tan frío, es una alternativa más económica y ecológica que el aire acondicionado.

Los sustitutos pueden ser provisionales y los puedes utilizar mientras apagas el equipo. Los ventiladores convencionales y los enfriadores evaporativos son algunas de las opciones disponibles. Al utilizar estos debes tener en cuenta los consejos que ya hemos mencionado, en particular evitar la exposición directa y prolongada.

6. Toma descansos cada hora

Los descansos te ayudarán también para estirar las piernas y despejar tu mente. Toma el descanso en una habitación diferente, en principio en una que no tenga aire acondicionado (o lo tenga apagado). Procura que su duración sea mínima de 5 minutos, y evita mantener una actitud sedentaria durante este periodo.

7. Cuida tu higiene del sueño

Por último, proteger la espalda del aire acondicionado pasa también por cuidar tu higiene del sueño. Los expertos han relacionado el dolor de espalda con la mala calidad del sueño. Si vas a trabajar o interactúas a lo largo del día con el aire acondicionado sin descansar apropiadamente es mucho más probable que el síntoma empeore.

Mejora tu higiene del sueño, lo cual pasa entre otras cosas por descansar ininterrumpidamente una media de 8 horas cada noche.

Proteger la espalda del aire acondicionado pasa por asumir hábitos muy fáciles de implementar. Al final, lo mejor que puedes hacer es regular la temperatura, ya que el descenso de esta es lo que hace que se manifiesten los síntomas. Si el dolor de espalda se mantiene lejos de estos contextos no dudes en buscar ayuda profesional.



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