Déficit de vitamina B12: ¿cuáles son sus consecuencias?
La vitamina B12 pertenece al grupo de las hidrosolubles. Se encuentra en los alimentos de origen animal y se necesita un aporte continuado de la misma para evitar un déficit. A continuación te vamos a enseñar más sobre este nutriente, tan importante para la vitalidad.
Lo primero que has de tener claro es que existen ciertas dietas restrictivas, como la vegana, que no incluyen alimentos de origen animal en su espectro. Esto genera un impacto negativo sobre los niveles de vitamina B12, haciéndose imprescindible su suplementación para prevenir problemas mayores.
Funciones de la vitamina B12
La principal función de la vitamina B12 es participar en la síntesis de los glóbulos rojos, tal y como afirma un estudio publicado en la revista Frontiers in Nutrition. Por este motivo, una carencia de la misma puede condicionar malformaciones en dichas células, lo que se relaciona con problemas de salud que veremos más adelante.
En paralelo, dicho micronutriente actúa también en diferentes rutas metabólicas relacionadas con las proteínas. Además, asegura el buen funcionamiento del sistema nervioso central, según la literatura científica más reciente.
¿Cómo lograr un correcto aporte de la sustancia?
Tal y como hemos afirmado, la vitamina B12 se encuentra en los alimentos de origen animal. Carnes, huevos y lácteos son fuentes de dicho nutriente, por lo que una dieta variada debería asegurar que se cubran los requerimientos, evitando complicaciones mayores.
Sin embargo, el problema viene cuando se plantean dietas restrictivas. La vegana, por ejemplo, carece de alimentos en su espectro que contengan el micronutriente, por lo que es preciso incluir un suplemento del mismo.
En condiciones normales y suponiendo una dieta saludable y variada, es extraño que se presente una deficiencia en la vitamina B12. El aporte debería de ser diario y, aunque no existen depósitos significativos en el organismo, por su carácter hidrosoluble, tardan en manifestarse los síntomas de su carencia.
Consecuencias de la deficiencia de vitamina B12
La primera de las consecuencias de la falta de vitamina B12 en la dieta es la aparición de anemia megaloblástica. Así lo evidencian las investigaciones actuales. Se origina un defecto en la producción de glóbulos rojos que los vuelve ineficientes a la hora de transportar oxígeno.
El síntoma principal de este tipo de anemia es el cansancio. La sangre reduce su contenido en oxígeno y dicho elemento llega a las células en menor proporción. Teniendo en cuenta que muchas rutas fisiológicas y metabólicas son dependientes de esta molécula, su eficiencia se ve condicionada. Por este motivo, no es de extrañar que se genere una situación de fatiga crónica.
Además, pueden originarse otros problemas derivados de una pobre ingesta del nutriente. Estudios recientes relacionan un bajo nivel de vitamina B12 con un incremento en el desarrollo de patologías cardiovasculares, sobre todo en el contexto de los ancianos. Un aporte ineficiente del micronutriente podría provocar un incremento de la concentración de homocisteína, sustancia asociada con un mayor riesgo cardíaco.
Por último, cabe destacar que un déficit de la misma genera problemas relacionados con la cognición. Se ha asociado sintomatología del sistema nervioso central a pacientes pediátricos que experimentan un aporte inadecuado del nutriente.
¿Qué hacer ante una deficiencia de vitamina B12?
Si experimentas fatiga o cansancio y no le encuentras una explicación clara a dicha situación, lo aconsejable es que acudas a un especialista para valorar la situación. El médico podrá pedir una analítica en la que aparezcan reflejados los valores de vitamina B12, de hierro y de las hormonas más influyentes.
Lo común es que el facultativo recete un suplemento de vitamina B12 para corregir la carencia que se ha creado. Sin embargo, este es un pequeño parche al problema. Resulta adecuado complementar con un profesional de la nutrición para valorar la alimentación habitual y detectar posibles ineficiencias en el aporte.
De este modo, si llevas a cabo una dieta restrictiva, será necesario establecer qué complementos dietéticos han de consumirse de forma regular y en qué dosis. Si la dieta es variada, puede ser que haga falta introducir de forma habitual alimentos con una elevada densidad, como las carnes rojas o las vísceras.
Otras causas de la anemia
La sensación de fatiga y de cansancio crónico puede ser el signo de alerta de que existe un proceso de anemia. Sin embargo, la causa no tiene por qué ser siempre un déficit de vitamina B12. Es incluso más frecuente que el origen del problema sea un aporte ineficiente de hierro.
Por este motivo, si se detecta una anemia ferropénica, la solución más eficaz suele ser la administración y prescripción de hierro artificial y la modificación de los hábitos dietéticos. En lo que a la anemia en general se refiere, lo más adecuado es la prevención, ya que una vez desarrollada la patología la mejora se realiza de manera lenta.
Exceso de vitamina B12 y sus problemas
Así como el defecto de vitamina B12 se considera nocivo para la salud, un exceso del mismo puede ser contraproducente. Algunas investigaciones publicadas en el año 2019 han relacionado el aporte excesivo y crónico de la vitamina con un incremento del riesgo de desarrollar cáncer de pulmón.
Está claro que los resultados todavía no gozan del más alto grado de evidencia. Sin embargo, varios artículos apuntan a que una ingesta demasiado alta de las vitaminas del grupo B puede resultar nociva para el funcionamiento de varios sistemas. Incluso desde el punto de vista cardiovascular.
Por este motivo, no se debe pautar la suplementación por defecto a la población en general. Es óptimo analizar cada caso e intentar siempre introducir el nutriente por medio de los alimentos. Solo si esto no es posible se debe valorar un complemento que evite un déficit.
Es necesario tener cuidado con los multivitamínicos. Estos productos suelen contar con megadosis de algunos micronutrientes que, administrados de forma sostenida, no colaboran con el cuerpo y con su metabolismo. Incluso existen casos de algunos que vienen enriquecidos con cafeína, lo que podría llegar a generar una tolerancia a la sustancia.
La importancia de una dieta variada
Con el objetivo de evitar el desarrollo de patologías derivadas del déficit o de la sobredosis de ciertos nutrientes, lo más adecuado es plantear una dieta variada. Es preciso incluir en la alimentación habitual productos procedentes de todos los grupos, intentando no realizar restricciones.
Asimismo, se aconseja evitar aquellos elementos que sí han demostrado ser tóxicos en cualquier cantidad. Estamos hablando del alcohol y del tabaco, así como de ciertos aditivos escondidos en los productos ultraprocesados. Los nitritos que se utilizan como conservantes podrían ser un ejemplo claro de ello.
Al mismo tiempo, se recomienda la práctica de ejercicio de manera regular. La actividad física consigue mejorar el funcionamiento del metabolismo y de las reacciones fisiológicas que tienen lugar de manera constante en el cuerpo humano. Recuerda que el sedentarismo es uno de los factores de riesgo más frecuentes.
Vitamina B12: un nutriente esencial
La vitamina B12 es un nutriente que no se puede fabricar de manera endógena en el cuerpo humano, por este motivo es preciso aportarlo por medio de la dieta. Sin embargo, solo se encuentra en los productos de origen animal. Los planes de alimentación restrictivos pueden ser deficitarios en este elemento.
En el caso de detectarse un aporte ineficiente, puede ser adecuado plantear una suplementación artificial, aunque esta nunca ha de extenderse en el tiempo de forma crónica. Lo óptimo es la ingesta por medio de los alimentos, para así garantizar un consumo correcto y natural.
Ten en cuenta que los signos de la deficiencia de vitamina B12 nunca son inmediatos, sino que se pueden llegar a producirse a mediano plazo o de manera paulatina. De este modo, si experimentas cansancio o fatiga crónica, acude al especialista para realizar una prueba de valoración. El análisis de sangre suele ser la herramienta diagnóstica en este caso.
Posteriormente, es recomendable que visites al nutricionista para adecuar la pauta dietética y evitar que dicha situación se vuelva a producir en el futuro. Así conseguirás mejorar el estado de salud y prevenir patologías complejas.
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