¿Qué es el efecto invernadero?

El efecto invernadero es un término que ha estado bajo la lupa durante décadas, aunque todavía persisten errores de interpretación. Te enseñamos la idea general para que la entiendas al margen de tecnicismos.
¿Qué es el efecto invernadero?

Última actualización: 02 agosto, 2022

Desde hace al menos dos décadas la mayoría de las personas se han habituado a una serie de términos y conceptos relacionados con el planeta. Cambio climático, energías renovables, huella de carbono, mitigación ambiental y por supuesto efecto invernadero son solo algunos de ellos. Aunque pareciera que todos estos términos están perfectamente claros, en la práctica aún existen muchas dudas.

A pesar de que la preocupación, las campañas de concienciación, los programas impartidos en los centros educativos y los planes de los gobiernos destinados a cuidar el planeta han sido de gran ayuda, también es justo decir que persisten todavía ciertos malentendidos. El día de hoy trataremos de explicarte qué es el efecto invernadero obviando detalles técnicos para que comprendas de una vez cuál es su impacto real.

¿En qué consiste el efecto invernadero?

En términos muy simples el efecto invernadero es el proceso natural mediante el cual nuestro planeta se calienta. Lo hace gracias a que los gases de la atmósfera atrapan el calor que ingresa del sol, de manera que estos no pueden escapar hacia el espacio exterior. Científicamente se identificó y analizó con detalle en 1896 en un artículo en el que se describía la influencia del ácido carbónico en la temperatura.

Nuestro planeta es lo que es gracias al efecto invernadero. Sin él la temperatura promedio de la Tierra sería bastante inferior a los 15 ºC, de manera que las condiciones e incluso la vida tal y como la imaginamos sería muy diferente. Este proceso se ha mantenido durante miles de millones de años, y ha sido mayor o menor en función de los cambios del planeta (erupciones masivas, impacto de meteoritos y demás).

El planeta recibe energía del sol en forma de luz infrarroja, luz visible y radiación ultravioleta. Parte de esta energía se refleja por las nubes, las masas de hielo y ciertas partículas de la atmósfera, mientras que otra parte se recoge por la nubes y otras partículas de la atmósfera. Una tercera parte se absorbe en la superficie de la Tierra, de manera que esta contribuye directamente a su calentamiento.

Tal y como nos recuerda la NASA, el efecto invernadero es imprescindible para el clima que podemos observar. Si eliminamos solo el dióxido de carbono de la atmósfera, el sistema colapsaría inminentemente y el planeta se enfriaría 33º centígrados. Las moléculas que median en este sistema se producen de manera natural, aunque una parte de ellas están allí por la participación del hombre en la quema de combustibles fósiles.

¿Cuál es la causa del efecto invernadero?

El efecto invernadero es un proceso natural
A pesar de que suele asociarse al efecto invernadero exclusivamente con la acción del ser humano, en realidad es un proceso natural del planeta Tierra.

La atmósfera está compuesta en su 99 % por nitrógeno, oxígeno y argón. También está compuesta por una serie de gases, los cuales completan el 0,9 % restante. Aproximadamente el 30 % de la energía solar que ingresa al planeta se refleja inmediatamente al espacio. El 70 % de ella ingresa de manera directa a la Tierra y contribuye a su temperatura promedio.

Este calor se irradia de vuelta en forma de luz infrarroja invisible. Solo el 10 % de esta luz logra salir de la atmósfera al espacio exterior, de manera que el 90 % se queda atrapada por la presencia de determinados gases en la atmósfera. Estos se redirigen de nuevo a la superficie del planeta, lo que ocasiona un efecto rebote que contribuye al calentamiento del mismo.

Los gases que componen el 0,9 % de la atmósfera que ocasiona el efecto invernadero se conocen como gases de efecto invernadero. De ellos te hablamos en el apartado siguiente, pero ten en cuenta que el exceso de estos o por el contrario su disminución tiene implicaciones severas en el clima. Un ejemplo de efecto invernadero tenue lo encontramos en Marte (-60 ºC de media), y uno excesivo en Venus (460 ºC de media).

En síntesis, algunos gases presentes en la atmósfera impiden que la energía solar regrese de nuevo al espacio. Su presencia allí es beneficiosa, ya que sin ellos la vida no sería posible. A pesar de que este sistema se altera de manera natural con el transcurrir de miles de años, en general se mantiene bastante estable. A pesar de ello, en los últimos cien años la mediación del hombre parece estar interrumpiendo este equilibrio.

Esto es que lo que afirman decenas de miles de estudios científicos en todo el mundo. No es este el lugar para citar a todos ellos, pero no podemos dejar de mencionar a los informes del IPCC. En ellos queda de manifiesto el papel del hombre en incrementar algunos gases de efecto invernadero, lo que explica de manera parcial el aumento de la temperatura durante las últimas décadas.

¿Cuáles son los gases de efecto invernadero?

Científicamente hablando, se consideran gases de efecto invernadero a todas aquellas moléculas que contienen tres o más átomos. La mayoría de estos han estado en la atmósfera durante miles de millones de años, con variaciones en cuanto a su cantidad.

Los gases de efecto invernadero se suelen clasificar en dos grandes grupos: los que causan cambios climáticos forzados y los que interactúan física y químicamente con los cambios de temperatura. Estos últimos también se denominan retroalimentadores. Veamos una selección de los principales gases de efecto invernadero:

  • Vapor de agua: es el gas de efecto invernadero más abundante en la atmósfera y se acopla a los llamados retroalimentadores. Aumenta a medida que la atmósfera se calienta, pero como consecuencia produce nubes y precipitaciones. De acuerdo con la Sociedad Estadounidense de Química (ACS) es responsable de hasta el 60 % del efecto invernadero.
  • Dióxido de carbono: el dióxido de carbono se libera a la atmósfera por la respiración, las erupciones de los volcanes y la quema de combustibles fósiles. Las concentraciones de este han aumentado desde la Revolución Industrial, y de acuerdo con las estimaciones seguirán haciéndolo durante el siglo XXI si no se toman medidas al respecto.
  • Metano: gas que se arroja a la atmósfera a través de diferentes procesos, como por ejemplo la producción y transporte de gas, carbón y petróleo. También por la descomposición de los desechos orgánicos, la ganadería, los desechos de vertederos, el cultivo de arroz y demás. Tiene un mayor impacto que el gas anterior, pero se encuentra en menor proporción en la atmósfera.
  • Óxido nitroso: se genera por el uso de fertilizantes orgánicos y comerciales, la quema de biomasa (un importante factor de riesgo para la EPOC) y la quema de combustibles fósiles. También por el tratamiento de aguas residuales y el uso de la tierra.
  • Clorofluorocarbonados: son un grupo de compuestos sintéticos de origen industrial, los cuales han sido regulados debido a una serie de convenios internacionales. Aún se arrojan miles de toneladas cada año, de manera que forman parte de los gases de efecto invernadero de nuestra lista.

Existen otros gases que contribuyen a que la energía solar no pueda escapar de la atmósfera, pero estos son los principales. Todos ellos operan en conjunto para mediar en el efecto invernadero. Como puedes observar, buena parte de su producción está ligada a entornos industriales o en todo caso incentivadas por el hombre.

¿Cuáles son sus principales consecuencias?

El efecto invernadero produce enfermedades
Si el efecto invernadero empeora cada vez más, es posible que existan consecuencias severas para los seres vivos, incluyendo los humanos.

Antes de precisar las consecuencias del efecto invernadero debes saber que el clima es un sistema muy complejo. Muchos de los efectos colaterales del incremento de los gases de efecto invernadero son difíciles de predecir, de manera que esto explica los errados pronósticos durante los últimos cincuenta años. Aún así, y siguiendo a la NASA, podemos señalar los siguientes:

  • La Tierra se calentará en algunas regiones (pudiendo provocar golpes de calor) y se enfriará en otras.
  • Un aumento de la temperatura calentará el océano y, al menos de forma parcial, derretirá los glaciares. Esto aumentará el nivel del mar.
  • Habrá mayor evaporación y precipitación en general. Esto está condicionado a la primera consecuencia, de manera que en otras regiones el clima será más seco.
  • Los cambios en la temperatura pueden tener efectos adversos en los cultivos.

Estos son solo cuatro consecuencias del efecto invernadero, consecuencias que además estamos percibiendo en el presente. Reiteramos que el clima es un sistema muy complejo, de manera que aún estamos comprendiendo el verdadero impacto de los gases y cómo funciona en sí misma la temperatura del planeta. No dudes consultar los enlaces citados para ampliar tu conocimiento en el tema.



  • Anderson, T. R., Hawkins, E., & Jones, P. D. CO2, the greenhouse effect and global warming: from the pioneering work of Arrhenius and Callendar to today's Earth System Models. Endeavour. 2016; 40(3): 178-187.
  • Arrhenius, S. XXXI. On the influence of carbonic acid in the air upon the temperature of the ground. The London, Edinburgh, and Dublin Philosophical Magazine and Journal of Science. 1896; 41(251): 237-276.

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