¿Qué es la odontología cosmética?

Lucir una sonrisa bonita y radiante como la de las celebridades es el objetivo de muchas personas. La odontología cosmética lo hace posible con diferentes procedimientos.
¿Qué es la odontología cosmética?
Vanesa Evangelina Buffa

Escrito y verificado por la odontóloga Vanesa Evangelina Buffa.

Última actualización: 23 septiembre, 2023

La odontología cosmética, también llamada estética dental, se enfoca en mejorar la apariencia y embellecer el aspecto de la sonrisa y del rostro. Debido a que en la actualidad existe un gran interés por el aspecto físico, esta especialidad odontológica ha ganado popularidad.

El aspecto de la dentadura juega un rol muy importante en las relaciones sociales y laborales de las personas. Además, influye en la autoestima y en la seguridad. Por este motivo, los procedimientos odontológicos actuales no solo se ocupan de la salud oral y de favorecer el normal funcionamiento de la boca, sino que también contemplan la estética de la sonrisa.

En este artículo te contamos detalles de los procedimientos dentales cosméticos que más se utilizan para lograr sonrisas bonitas y radiantes.

La odontología cosmética

La odontología cosmética es una especialidad de la atención dental que busca mejorar el aspecto de la dentadura y, con ello, la apariencia del rostro. Se enfoca no solo en la estética de los dientes y las encías, sino también en que los cambios que se realizan se ajusten de manera armónica a los rasgos faciales del paciente.

Existen varios procedimientos que le permiten al odontólogo mejorar la apariencia de la boca. Algunas alternativas son meramente cosméticas. En cambio, otras forman parte de un tratamiento odontológico integral que repara algún daño, recupera la salud y, a la vez, mejora el aspecto de la sonrisa.

La mayoría de los tratamientos dentales logran restaurar la apariencia, la salud y la función de la boca. Sin embargo, la estética dental se enfoca en embellecer la sonrisa y lograr el mejor aspecto posible para los dientes y las encías, de manera que la dentadura se vea pulcra, armónica y radiante.

Según un artículo de revisión publicado en la Revista Rumana de Medicina Militar, existe un límite ético muy fácil de transgredir en algunos procedimientos dentales cosméticos. Aunque las maniobras se realicen en un ámbito médico, algunas no buscan la salud bucal, sino que solo tienen un carácter embellecedor y, a veces, afectan los tejidos sanos sin ninguna función preventiva o provocando complicaciones a largo plazo.

Si bien contar con una boca bonita aporta múltiples beneficios psicológicos y sociales a la persona, es importante que el odontólogo pueda velar siempre por la salud oral de sus pacientes. En este sentido, es necesario que el profesional opte por procedimientos que ayuden a sus pacientes a verse bien sin arriesgar la integridad de las estructuras orales. Un artículo publicado en la Revista Dental Update, insta a los dentistas a proporcionar un tratamiento dental cosmético que sea mínimamente destructivo y, a largo plazo, beneficie al paciente.

En general, cualquier persona adulta puede recurrir a la mayoría de estos tratamientos. De todos modos, es indispensable que la boca se encuentre sana. Si existen patologías bucales por resolver, como caries o periodontitis, primero se deben tratar estos trastornos, recuperar la salud oral y luego mejorar el aspecto de la boca.

¿Cuándo es necesaria la odontología cosmética?

Los tratamientos de odontología cosmética son necesarios, sobre todo, cuando la persona siente que tiene un problema con el aspecto de su boca. La disconformidad respecto a la apariencia bucal puede ocasionar baja autoestima, falta de confianza, sentimientos de vergüenza y dificultades para relacionarse. La bibliografía demuestra que existe una estrecha relación entre el aspecto de la sonrisa y la calidad de vida de las personas.

Estas son algunas de las alteraciones que pueden llevar a las personas a requerir tratamientos de odontología cosmética:

  • Problemas de mordida, asimetrías dentales, dientes torcidos, apiñados o mal posicionados
  • Fracturas dentales.
  • Caries y dientes rotos.
  • Falta de piezas dentarias.
  • Dientes largos o retracción gingival.
  • Sonrisa gingival, exceso de encía o dientes cortos.
  • Diastemas o piezas dentarias muy separadas entre sí.
  • Dientes manchados, pigmentados, amarillos o decolorados.

Actuar sobre estas afecciones mejora la imagen de la persona y, con ello, la propia estima, la seguridad en sí misma y las relaciones sociales. En este sentido, aunque los tratamientos parezcan solo estéticos, en realidad repercuten en muchos aspectos que influyen en la salud.

¿Qué tratamientos realiza la odontología cosmética?

Para lograr un mejor aspecto de la boca, la odontología cosmética debe realizar un abordaje personalizado para cada paciente. Las necesidades y expectativas de cada persona son diferentes y el profesional debe ofrecer la solución más adecuada para cada caso clínico.

Antes de comenzar con cualquier procedimiento se analizan varias características de la persona:

  • Aspecto de la dentadura: tamaño, forma, color, alineación y estado de las piezas dentarias.
  • Tipo de mordida.
  • Expectativas respecto al tratamiento.
  • Facciones, medidas y proporciones del rostro.
  • Problemas de salud oral que requieren tratamientos específicos.

Con todos estos datos, el profesional diseña la sonrisa y planifica los procedimientos necesarios. Según la bibliografía, el uso de soportes digitales ayuda a los profesionales a exponer a sus pacientes los posibles resultados antes de realizar ninguna maniobra. Por su parte, los pacientes comprenden mejor los efectos de los tratamientos y los aceptan con conocimiento.

A continuación, detallamos los tratamientos de estética dental que se utilizan con más frecuencia.

Carillas dentales

Las carillas dentales son un procedimiento cosmético que permite mejorar el aspecto de las piezas dentarias de manera rápida y sencilla. Consisten en cementar una fina capa de porcelana o de resina compuesta sobre la superficie externa de los dientes para que se vean mejor. Con estos recubrimientos se puede cambiar la forma, el tamaño, la longitud y el color de los elementos dentarios.

Son de utilidad para cubrir defectos como manchas, decoloraciones, hoyos y fracturas. También se pueden usar para tratar algunos casos de diastemas, recubriendo el espacio entre las piezas dentarias.

Para colocar una carilla, el odontólogo debe realizar un pequeño desgaste sobre el esmalte del diente. Con esto se genera el espacio suficiente para recibir la carilla. La confección del recubrimiento se puede hacer de manera directa sobre la pieza dentaria o de forma indirecta en un laboratorio dental, previa impresión de la boca.

Esta técnica se considera irreversible, debido al tallado del elemento dentario. Aunque se trate de un desgaste mínimo, obliga a esa pieza dentaria a estar cubierta con un material artificial para siempre.

De todos modos, los estudios consideran a esta técnica como una alternativa rápida, segura, conservadora, con un mínimo trauma en los dientes, que permite restaurar la estética y la función de los dientes. Logra resultados muy similares a la dentadura natural.

Blanqueamiento dental

El blanqueamiento dental es un tratamiento de estética dental que permite eliminar manchas de los dientes y aclarar su tonalidad, logrando un aspecto más blanco y limpio. Es de utilidad cuando los elementos dentarios están pigmentados, manchados, teñidos o decolorados.

El procedimiento consiste en la aplicación de sustancias químicas especiales sobre las superficies dentarias. Las más utilizadas son el peróxido de hidrógeno y el peróxido de carbamida.

Aunque los investigadores consideren que es necesario realizar más investigaciones para dilucidar con exactitud el fenómeno químico a través del cual los peróxidos logran aclarar el esmalte, los resultados son muy notorios. Se obtienen de manera rápida y sencilla.

Para realizar el tratamiento, se coloca el producto en unas férulas especiales diseñadas para cada paciente. De esta manera, se previene la irritación y los daños en las encías y demás tejidos blandos.

Según las necesidades y particularidades del paciente, el proceso se puede realizar de distintas maneras:

  • En el consultorio dental, por el odontólogo.
  • En el hogar, a cargo del paciente, siguiendo las indicaciones del profesional.
  • Combinando ambos métodos.

Para poder realizar este procedimiento de odontología cosmética, la boca debe estar en óptimas condiciones de salud. Por este motivo, es fundamental que el dentista realice una valoración previa del estado bucal y, si existen otras patologías activas, las trate antes de comenzar con el blanqueamiento.

Gingivectomía e injertos de encía

Las intervenciones en la encía también forman parte de los procedimientos propios de la odontología cosmética. A veces, el tejido gingival crece de manera excesiva y provoca la sensación de poseer dientes muy pequeños.

Por el contrario, si la encía se retrae, deja al descubierto las raíces de los dientes, afectando la salud y la estética de la persona. Para estos casos se puede recurrir a las siguientes alternativas:

  • Injertos de encía: cuando las encías están retraídas, las raíces de los dientes quedan expuestas provocando sensibilidad, mayor riesgo de caries y una imagen de dientes demasiado largos. Para recubrir esta falta de tejido gingival se puede realizar una cirugía en la que se coloca un injerto de encía que cubre la raíz expuesta y le aporta armonía y salud a la dentadura.
  • Gingivectomía: se trata de una pequeña cirugía que extrae el exceso de encía y contornea el tejido para darle una forma armónica y natural. Si es necesario, también se elimina tejido óseo. Con esta intervención se expone más tejido dentario, por lo que es de utilidad cuando los dientes parecen muy pequeños o las encías se notan demasiado al sonreír.

Reconstrucciones dentales

Cuando los dientes están rotos por caries o por fracturas, las reconstrucciones dentarias permiten devolverles su forma, funciones y también la estética perdida. Se utilizan resinas compuestas del mismo color que los dientes naturales que rellenan y moldean las piezas dentarias para obtener un aspecto similar al original.

Según un artículo editorial de la Revista Dental Medicon, las restauraciones han de recuperar la forma, la función y la apariencia de los dientes de manera idéntica a la de una pieza natural. Con la funcionalidad se logra que la persona utilice su boca de manera adecuada, mientras que con la estética, se le permite desarrollarse con confianza en la sociedad.

Limpiezas, microabrasión y contorneado del esmalte

Las limpiezas profesionales habituales son un método sencillo con el que se elimina el sarro, las manchas superficiales y las pigmentaciones de las piezas dentarias. Con este procedimiento simple se controla la placa bacteriana, se favorece la salud dental y también se mejora el aspecto de la dentadura.

De todos modos, en algunos pacientes más exigentes, se puede recurrir a la microabrasion del esmalte. Este complemento consiste en pasar piedra pómez fina con una máquina de microabrasión sobre las superficies dentarias para logar un aspecto más limpio y brillante.

Por su parte, el contorneado dental es otro método cosmético que se basa en limar las irregularidades y los pequeños defectos de los dientes anteriores para dejarlos uniformes, alineados y todos en un mismo nivel. Según el reporte de un caso, publicado en la Revista Internacional de Odontología Estética, este procedimiento, también llamado «ameloplastía», se considera mínimamente invasivo, conservador, de bajo costo biológico, económico y permite obtener buenos resultados funcionales y estéticos.

Ortodoncia

Los tratamientos de ortodoncia se utilizan para tratar los problemas de mordida y corregir la alineación de los dientes. Con esto, además de aportar salud y bienestar a la persona, mejoran el aspecto de la sonrisa.

Son de utilidad para resolver problemas de mordidas cruzadas, abiertas, sobremordidas, asimetrías, dientes torcidos, separados, apiñados o malposicionados. Para las personas que buscan cuidar su aspecto, existen alternativas muy estéticas y discretas para corregir sus problemas de mordida sin afectar su imagen.

Estos son algunos de los tratamientos de ortodoncia más imperceptibles:

  • Brackets linguales: en este caso, los brackets se cementan a las caras linguales de las piezas dentarias, es decir, el aparato se lleva en la parte interna de la dentadura. También es conocida como «ortodoncia de incógnito», pues es muy difícil que alguien note que el paciente lleva frenos.
  • Alineadores transparentes tipo Invisalign: se trata de cubetas transparentes que se confeccionan de manera específica para la boca del paciente y se recambian de manera progresiva para que apliquen las fuerzas que movilizan las piezas dentarias. Son removibles: el paciente se las puede quitar para comer, higienizarse o ir a algún evento social. De todos modos, para el éxito del tratamiento es relevante usarlas la mayor parte del día.
  • Brackets de zafiro: es la opción más estética frente a los clásicos brackets de ortodoncia fija. Están confeccionados de un material translucido que hace que el aparato sea menos notorio.

Coronas o fundas

Las fundas se utilizan para recubrir la totalidad de la porción coronaria de los dientes. Se trata de una especie de capuchón con la forma, el tamaño y el color de un elemento natural.

Se utilizan para devolver el aspecto de dientes muy destruidos, que tienen endodoncias previas o presentan defectos muy notorios. También se colocan sobre implantes dentales, para recuperar elementos ausentes.

Implantes, puentes o prótesis

La falta de uno o más dientes en la boca es una problemática bastante habitual que afecta la apariencia de la sonrisa. Reponer estos elementos ausentes mejora las funciones orales, evita complicaciones en la boca y devuelve la estética perdida.

Para rehabilitar la boca sin dientes, los pacientes disponen de diferentes opciones según sus necesidades y posibilidades:

  • Prótesis dentales: se trata de dentaduras que reemplazan los dientes faltantes y el tejido circundante. Pueden ser completas, cuando faltan todos los dientes de tu arcada, o parciales, cuando quedan algunos elementos naturales en la boca y solo se reponen piezas puntuales. Se trata de una opción aceptable para recuperar la funcionalidad de la boca y mejorar su aspecto.
  • Puentes dentales: se usan para reemplazar uno o dos dientes perdidos a través de un método fijo y estético. Consiste en insertar, sobre los dientes sanos previamente tallados, una o dos coronas unidas a dientes artificiales que reemplazan a los faltantes.
  • Implantes dentales: consiste en colocar dispositivos metálicos en el interior de los huesos maxilares y, sobre ellos, se dispone una corona, puente o prótesis que reemplaza las piezas dentarias faltantes. Se trata de la opción más estable, cómoda, funcional y estética; pero también la más costosa. Según un estudio transversal que investigó los factores asociados con la satisfacción de pacientes rehabilitados con implantes, la conformidad con el tratamiento es muy alta.

El cuidado oral como parte de la odontología cosmética

Algunas problemáticas que afectan el aspecto de la boca se pueden solucionar con los procedimientos que propone la odontología cosmética. De todos modos, más allá de las mejoras en el aspecto físico, lo primordial es velar por la salud oral.

El cuidado habitual de las estructuras bucales es una de las maneras más sencillas y eficientes de evitar los problemas que repercuten en la estética de la sonrisa y preservar la boca saludable y bonita.




Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.