Los 8 tipos de mentiras

No todas las mentiras se dicen con el mismo propósito. Repasamos qué dicen los expertos sobre los tipos de mentiras más frecuentes.
Los 8 tipos de mentiras
Diego Pereira

Revisado y aprobado por el médico Diego Pereira.

Última actualización: 25 marzo, 2022

Mentir es una habilidad que en mayor o menor medida todo tenemos desarrollada. Los científicos estipulan que la capacidad de mentir se desarrolla entre los 3 y los 4 años de edad, y se va perfeccionando en el transcurso de los años. Existen varios tipos de mentiras, los cuales se manifiestan de acuerdo con la intención, el contexto e incluso la personalidad del mentiroso.

A menudo se define a la mentira como un antivalor. Este es un análisis muy simplista, ya que como veremos esta incentiva el comportamiento prosocial y las relaciones con las personas. En su justa medida es una estrategia útil para hacer frente a las experiencias del día a día, al menos si aprendemos a no abusar de ellas. Te enseñamos qué dicen los científicos de los tipos de mentiras y sus funciones.

¿Cuáles son los principales tipos de mentiras?

La capacidad de mentir es algo que surge de manera natural durante los primeros años de vida. Los expertos han encontrado que los niños mienten principalmente por dos razones: para evadir responsabilidades por sus transgresiones y para controlar el comportamiento de los demás. Estos motivos son los mismos que llevan a un adulto a mentir, de manera que la utilidad de ellas no es menor.

La mentira no consiste solo en no decir la verdad. Va mucho más allá de esto, ya que con frecuencia se relaciona con el engaño, la estafa, la publicidad (esta es en sí misma una forma de gestionar la mentira) e incluso el placer. Paul Ekman estudió con detalle el componente gestual de los mentirosos, otro detalle a considerar al momento de comprender lo que las mentiras son.

Todo el mundo miente, aunque no lo hacen siempre con los mismos objetivos o intenciones. Con base en esto podemos estipular varios tipos de mentiras, muchos de ellos relacionados intrínsecamente con la personalidad del mentiroso. Aunque se pueden clasificar decenas y decenas de tipos de mentiras, te presentamos a continuación una selección de los más comunes.

1. Mentiras corteses o prosociales

A algunos investigadores les ha llamado la atención una categoría que denominan mentiras corteses o prosociales. Alude a aquellas mentiras que buscan ocultar información deliberadamente debido a las repercusiones éticas o morales. Todo esto en un entorno social, de manera que son un engranaje elemental que permite la vida en sociedad.

Un ejemplo de mentira cortés o prosocial lo encontramos cuando no manifestamos nuestro disgusto por el sabor de la comida a un camarero, cuando perdonamos automáticamente un golpe que recibimos de un transeúnte en la calle o cuando pasamos por alto un disgusto (lo reprimimos) para no hacer un espectáculo en la ciudad. Las mentiras corteses son bien recibidas por la sociedad, e incluso cuentan con una alta estima.

2. Mentiras fáciles

Los tipos de mentiras incluyen las piadosas
Las mentiras fáciles pueden ayudar a la persona a “salir” de una situación específica sin sufrir mayores consecuencias en caso de ser descubierta.

Los investigadores usan el término mentiras fáciles para aludir a aquellos discursos que no requieren de un entretejido grande para elaborarlo. Se caracterizan porque el mentiroso las formula de forma automática y por lo general no implican consecuencias mayores. Suelen olvidarse con rapidez y también son útiles para ayudar a mantener las relaciones sociales de nuestro entorno.

Podemos recurrir a las mentiras fáciles para evadir rápidamente un tema, una discusión o como método para proteger nuestra integridad. Son las más utilizadas en el día a día, ya que no requieren de un gran esfuerzo mental para construir o mantener. En caso de que los demás la descubran no se tendrá que lidiar con secuelas desagradables, de manera que las integramos con regularidad en el discurso.

3. Mentiras graves

Las mentiras graves son la otra cara de la moneda de la manifestación anterior. Implican una meditación, un esfuerzo o un proceso previo que permite construir un discurso coherente. Este puede hacerse en el momento en que se pronuncia o por el contrario prepararse con anterioridad.

Tal y como señala la evidencia, las mentiras graves se usan para lo siguiente: parecer un tipo de persona diferente, lastimar o proteger a los demás, evitar la confrontación o el castigo, hacer cosas que se cree se tiene derecho a hacer y manipular. Cuando se descubren, conllevan a una serie de consecuencias, razón por la cual el mentiroso es tan meticuloso al construirla.

4. Mentiras blancas

Las mentiras blancas, también conocidas como mentiras piadosas, son uno de los tipos de mentiras más conocidos. Los científicos las clasifican en dos grupos: las mentiras blancas altruistas y las mentiras blancas de Pareto. En el primer caso se hace referencia a las mentiras que ayudan a otro a expensas del mentiroso. En el segundo caso a los discursos que benefician tanto al otro como al propio mentiroso.

La proporción de estos dos tipos de mentiras blancas no es igual. Las personas apelan más por las de tipo altruista, de manera que están dispuestas a mentir por los demás aunque esto implique una pequeña repercusión negativa para sí mismos. Se pueden usar las mentiras altruistas por cuestiones éticas o morales, en especial cuando a quien se trata de encubrir guarda una estrecha relación con el mentiroso.

5. Promesas incumplidas

Las promesas incumplidas, también conocidas como promesas rotas, son otro de los tipos de mentiras más usados por las personas. Se consideran mentiras per se cuando quien realiza una promesa sabe que no la cumplirá. La mayoría de ellas son inofensivas y las personas las usan para evitar un momento incómodo, para no decepcionar al interlocutor o simplemente como estrategia temporal para afrontar un problema.

6. Mentiras grises

Algunos investigadores proponen el término mentiras grises para hacer referencia a un estado intermedio entre las mentiras fáciles y las graves. No son lo suficientemente elaboradas o complejas para considerarlas como parte de estas últimas, pero tampoco se pueden catalogar como completamente inofensivas. Consolidan una amalgama, una que además tiene cierto grado de consecuencias de por medio.

7. Mentiras patológicas

Los tipos de mentiras incluyen las patológicas
Las personas que utilizan las mentiras patológicas pueden llegar a tener problemas en muchos ámbitos, incluyendo el laboral.

Como ya hemos analizado las mentiras no son un discurso trivial. Tienen una función social bastante clara, y la mayoría del tiempo responden a objetivos específicos del mentiroso. En algunos casos, estos criterios se desdibujan y dan lugar a lo que se conoce como mentira patológica. Esto es la necesidad compulsiva de mentir sin importar el contexto o la situación.

La Asociación Americana de Psicología (APA) señala que la mentira patológica es común en personas con dependencia al alcohol, con daño cerebral y con algunos trastornos (como el trastorno de la personalidad antisocial). No tiene que existir un motivo evidente para mentir, e incluso los expertos aún discuten hasta qué punto los mentirosos patológicos pueden controlar los impulsos de este tipo.

8. Mentiras descaradas

El último de los tipos de mentiras más frecuentes es la mentira descarada. Es aquella que sostiene una persona a pesar de que su interlocutor o interlocutores saben que no dice la verdad. También se usa para hacer referencia a las mentiras que, una vez descubiertas, no generan algún tipo de vergüenza, incomodidad o arrepentimiento en el mentiroso. Estos incluso pueden llegar a enorgullecerse de decirlas.

Aunque hemos dejado otros tipos de mentiras por fuera de nuestra lista, las que hemos mencionado reflejan muy bien el comportamiento de las personas. Finalizamos recordando la tesis que presentamos al inicio: todo el mundo miente, solo que no lo hacen con los mismos objetivos o intenciones. La mentira no siempre es condenable, ya que el juicio hacia ellas depende del contexto.



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