Verrugas en el cuello: causas, tratamientos y recomendaciones
Entre los problemas más frecuentes de la piel están las verrugas, tanto las que aparecen en manos y pies, como las que se localizan en otros sitios, como el cuello. Varían en apariencia y tamaño, pudiendo estar solas o en grupos.
Para muchas personas, las verrugas en el cuello constituyen una preocupación estética de gran importancia. No obstante, debes saber que estas lesiones no se convierten en malignas y no son precursoras de cáncer de piel. Aun así, es posible tratarlas con métodos naturales y con abordajes médicos.
¿Qué son las verrugas?
Tres capas son las que constituyen la piel. La más superficial de ellas se llama «epidermis» y es allí donde se asientan las verrugas.
En sí, se trata de lesiones benignas por un crecimiento anormal de las células de la epidermis. Este crecimiento descontrolado origina la superposición de estratos y la apariencia de los distintos tipos de verrugas.
Las localizadas en el cuello suelen ser pequeñas y redondeadas. Pueden presentar colores y tonos diversos, entre el rosado y el marrón.
Por lo general, su superficie es áspera y, si se miran con detenimiento, se pueden identificar unos pequeños puntos negros típicos. Los puntos no indican una infección o mayor gravedad.
¿Por qué aparecen?
Las verrugas en el cuello, al igual que muchas otras, ubicadas en diferentes zonas del cuerpo, tienen como principal responsable al virus del papiloma humano o VPH. El síntoma principal de la infección por este agente es, justamente, la lesión en la piel.
No hay un solo VPH. En realidad, se trata de un grupo diverso que incluye más de 100 tipos diferentes. Se clasifican de la siguiente manera:
- De bajo riesgo: son los que tienden a causar verrugas comunes, como las del cuello, manos y pies. Algunos de los involucrados son el VPH-6 y el VPH-11.
- De alto riesgo: estos tipos están asociados con un mayor riesgo de cáncer a futuro, en especial, de cáncer cervical uterino. Los representantes son el VPH-16, VPH-18 y VPH-31, entre otros.
Este virus es muy contagioso. Puede sobrevivir en superficies variadas, como las textiles.
Si una persona porta el virus, puede propagar las verrugas a otra zona de su cuerpo o a otras personas. Es por ello que, para reducir el riesgo, se necesita evitar el rascado.
Ante esta infección, el sistema inmunitario juega un papel muy importante. Su debilitamiento favorece la aparición y propagación de las lesiones.
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Tratamientos médicos para las verrugas en el cuello
El tratamiento que ofrecen los médicos busca resolver el problema estético y las molestias personales. No siempre se planteará la posibilidad de abordar las lesiones, ya que sobre las que son muy pequeñas, no existe un beneficio claro de extirparlas.
Además, muchas de ellas se autolimitan y se resuelven por sí mismas. Sobre todo, en la edad pediátrica.
El manejo implica, antes de iniciar, hacer un diagnóstico diferencial para distinguir las verrugas de otras enfermedades de la piel, como las siguientes:
- Quiste epidérmico
- Molusco contagioso
- Queratosis seborreica
- Carcinoma de células escamosas
Medicamentos tópicos
Los fármacos tópicos son productos que se aplican sobre la lesión. Resultan la opción menos invasiva para el manejo de las verrugas en la piel.
Con este objetivo se puede utilizar ácido salicílico, imiquimod, podofilina o cantaridina. También existe la posibilidad de usar preparados combinados con diferentes porcentajes de estas sustancias, como refiere un artículo científico de 2019.
Cada fármaco debe emplearse según la posología y las recomendaciones que brinde el profesional de la salud que lo prescriba. Para observar resultados se debe ser paciente y constante, ya que los cambios se generan de manera gradual y pueden tomar meses.
Láser o electrocirugía
El láser permite eliminar verrugas por su mecanismo de acción con calor. La luz que emite el dispositivo médico destruye de manera selectiva los vasos sanguíneos que nutren a la verruga. Por lo general, se requieren varias sesiones para lograr el objetivo.
Del mismo modo, la corriente eléctrica de la electrocirugía también transmite calor para «quemar» la lesión. Si bien los resultados pueden ser buenos, existe la posibilidad de que haya reincidencia a mediano plazo.
Crioterapia
Este es un tratamiento usado con frecuencia para eliminar verrugas. No está claro que sea superior a otros métodos, pero sí se han multiplicado las variantes de su aplicación; al punto de que ya existen dispositivos en venta para su uso en el hogar.
Según algunos investigadores, la crioterapia no es superior al empleo de antivirales en medicamentos. Por otro lado, podría tener una tasa mayor de efectos secundarios.
La técnica consiste en la aplicación de nitrógeno líquido, a muy bajas temperaturas. Se congela la lesión y esta se desprende de la piel sana.
Extracción quirúrgica
Este método se suele reservar para casos de lesiones grandes que persisten, a pesar del empleo de otros tratamientos previos. De manera sencilla, con bisturí, se corta la verruga para dejar solo piel sana.
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Tratamientos caseros para las verrugas en el cuello
Existen remedios naturales de uso tradicional que podrían ser útiles para el manejo de las verrugas en el hogar. De todas maneras, es preferible consultar con un profesional antes de aplicarlos.
La condición de «naturales» no los hace inocuos. Además, debemos tener la confirmación del diagnóstico, de modo que no demoremos el abordaje adecuado por pensar que tenemos verrugas y, en realidad, estamos ante otra patología.
Ajo
El ajo es uno de los tratamientos naturales para las verrugas más conocido. Según sabemos por la evidencia científica, sus componentes tienen propiedades antivirales.
Para emplearlo en este caso hay que tomar un diente y formar una pasta, mediante el aplastamiento del mismo. Luego, se coloca la pasta sobre la verruga y se deja un día completo, cubierta con una curita o un vendaje.
Papa
El uso de rodajas del vegetal para tratar verrugas es un remedio casero que se basa en la creencia popular de que ciertas sustancias presentes en las papas podrían ayudar. No hay evidencia científica sólida que lo respalde.
Si se quiere implementar, hay que cortar una papa cruda en rodajas delgadas. Luego, se coloca sobre la verruga y se asegura con un vendaje.
Es posible dejar que actúe durante toda una noche y retirar a la mañana. Así, se repite por varias jornadas hasta corroborar si hay o no un efecto concreto. De todas maneras, no existe un tiempo total estipulado.
Aceite de árbol de té
Diluye el aceite de árbol de té con un aceite portador, como el de coco o de oliva. La proporción es una parte del de árbol de té en tres partes del portador.
Aplica una pequeña cantidad de la mezcla sobre la verruga y masajea. Cubre con un vendaje y repite dos veces al día, por la mañana y por la noche.
Según una reciente publicación científica de 2023, considerar el aceite de árbol de té como opción terapéutica contra las verrugas por VPH es costo-efectivo. Además, no representa un método invasivo ni causa dolor.
Cinta americana
La cinta americana se puede usar sobre verrugas que asientan en la piel, colocando y sacando repetidamente, de modo que se reduzca la lesión por fricción. Algunas investigaciones encontraron que constituye una opción barata y práctica.
El único cuidado a tener es que el acto de desprender la cinta se realice con precaución. De otro modo, se generará irritación e inflamación.
Formas de prevenir las verrugas en el cuello
Prevenir las verrugas en el cuello y en otras partes del cuerpo puede ser difícil. Sin embargo, hay algunas medidas que puedes tomar, como las siguientes:
- Fortalecer el sistema inmunitario: con una alimentación balanceada, ejercicio regular y suficiente descanso.
- Mantener una buena higiene personal: lavarse las manos con regularidad con agua y jabón.
- No tocar ni rascar las verrugas: manipularlas aumenta el riesgo de propagación del VPH.
- Evitar compartir objetos personales: como toallas, cuchillas de afeitar o cortaúñas.
Las verrugas en el cuello no son una enfermedad severa. Pero podemos evitarlas con los cuidados que ya mencionamos. Ahora bien, si las tienes, programa una consulta médica para despejar tus dudas.
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