Psicopatía: cómo piensan y actúan los psicópatas
Se habla mucho de la psicopatía, ya sea en la televisión, en el cine o en la literatura. Y sobre todo, desde la psicología criminal y forense. Pero ¿sabemos en realidad cómo piensa y actúa un psicópata?
En este artículo haremos un breve recorrido por la historia de la psicopatía: por sus primeras definiciones y por los criterios diagnósticos del trastorno establecidos por el médico estadounidense Cleckley.
Finalmente, hablaremos de la gran aportación que hizo el psicólogo canadiense Hare, con su instrumento para evaluar la psicopatía: el PCL-R (Revised Psychopathy Checklist).
Psicopatía: cómo piensan y actúan los psicópatas (primeras definiciones)
A lo largo de los años, han sido muchos los autores que han ido tejiendo diferentes concepciones de la psicopatía. Las principales construcciones de término se pueden agrupar en dos grandes bloques de escuelas: las escuelas americanas y las europeas. ¿Qué diferencia a cada una de ellas?
Escuelas europeas
Pinel fue el primer autor en hablar de la psicopatía, y fue en 1801. Fue el que hizo la primera clasificación diagnóstica de esta alteración psicológica, usando el término “manie sans delire”. Más adelante, en 1835, Pritchard, de Inglaterra, utilizó el término “moral insanity”. Fue él el precursor de la escuela ambientalista.
El interés por la psicopatía se fue extendiendo hasta llegar a Alemania, donde Koch (1891) introdujo el concepto de “psicopatía inferior”. Cinco años más tarde, el psiquiatra alemán Emil Kraepelin presentó el término de “personalidad psicopática“.
En Suiza, Meyer (1908) separa los casos psicopáticos de los casos psiconeuróticos, denominándolos “tipos constitucionalmente psicopáticos inferiores”. Es así como surge el origen psicogenético de la psicopatía.
Por su parte, Schneider (1923), en Alemania, establece su propia clasificación de las personalidad psicopáticas, con una base orgánica y ambiental.
Escuelas americanas
Entre las figuras más relevantes que aportaron conocimiento al ámbito de la psicopatía, pertenecientes a la escuela americana, encontramos a Rush (1812), quien habla de la insensibilidad moral de los psicópatas como un defecto congénito.
Más delante, Cleckley (1941) esboza su perfil de la psicopatía en “The mask of sanity”. En 1994 se construye la escala desviación psicopática (Pd) del MMPI, y en 1948 Gough expone su primera teoría sociológica sobre la psicopatía.
Las aportaciones de Cleckley: ¿cómo es un psicópata?
Hervery Cleckley fue un médico estadounidense reconocido y, gracias a sus aportaciones, una figura muy relevante en el ámbito de la psicopatía. Nació en 1903 y falecció en 1984.
Fue el pionero en la investigación sobre este tipo de personalidad, y estableció una serie de criterios diagnósticos para la psicopatía. Dichos criterios fueron descritos en su obra, ya mencionada, “The Mask of Sanity” (1941).
¿Cómo piensan y actúan los psicópatas? Los criterios de Cleckley para la psicopatía (Luengo y Carrillo de la Peña, 1995) nos permiten conocerlo (aunque es importante saber que, a día de hoy, algunos de estos criterios han cambiado de forma ligera):
Encanto externo y notable inteligencia
Son personas que, de cara al exterior, son muy encantadoras. Es por ello que pueden pasar en cierto modo “desapercibidas”, en el sentido de que pocos pueden creer que son psicópatas. También se caracterizan por poseer una gran inteligencia.
Ausencia de alucinaciones u otros signos de pensamiento irracional
Al contrario de lo que se pueda creer, los psicópatas no tienen ningún trastorno mental como sería una esquizofrenia o cualquier otro trastorno psicótico. Es por ello que no tienen alucinaciones ni presentan otros signos de pensamiento irracional (es decir, su contacto con la realidad está intacto).
Ausencia de nerviosismo o de manifestaciones psiconeuróticas
Según Cleckley, tampoco se muestran nerviosas con facilidad. En este sentido, tienen un gran control emocional.
“La ausencia de empatía que sufre el psicópata le impide sentir placer mediante la observación de la felicidad en los demás. El placer de los otros solo le provoca envidia y codicia”.
-Vicente Garrido Genovés-
Inestabilidad, poca formalidad
A nivel emocional pueden ser bastante inestables.
Falsedad e insinceridad
Son personas que mienten con muchísima facilidad. Además, lo hacen sin ningún tipo de remordimiento o culpa.
Falta de sentimientos de remordimiento o vergüenza
En línea con lo que decíamos en el punto anterior, son personas sin capacidad para sentir remordimiento, culpa o vergüenza. Así, aunque puedan simular esas emociones, son incapaces de experimentarlas.
Conducta antisocial inadecuadamente motivada
La conducta antisocial hace referencia a todos aquellos comportamientos que tienen el objetivo de perturbar el orden social o de violar las normas sociales. Son personas que actúan de forma antisocial, eso es violando los derechos de los demás.
Razonamiento insuficiente y falta de capacidad para aprender de la experiencia
Son incapaces de aprender de las experiencias vividas y de los errores.
Egocentrismo patológico e incapacidad de amar
Son personas muy egocéntricas, que solo miran por su propio beneficio. Para ellos los demás son personas de las que obtener algún tipo de beneficio.
Por otro lado, al no tener sentimientos y no poder experimentar emociones, son incapaces de amar. Pueden simular esta emoción, o reproducir las conductas que hacen las personas que aman (es decir, simular las muestras de amor y cariño), pero no pueden sentir esa emoción.
Pobreza general en las principales relaciones afectivas
Sus relaciones emocionales son pobres en el sentido afectivo, y esto se debe a esa incapacidad para entregarse de forma real al otro.
Pérdida específica de la intuición
Podríamos definir la intuición como una habilidad para comprender o percibir algo de forma clara e inmediata, sin que la razón intervenga en este proceso. Los psicópatas, al ser tan fríos y calculadores, presentan dificultades para ser intuitivos.
Insensibilidad en las relaciones interpersonales generales
A raíz de la falta de emociones y sentimientos, podemos decir que son personas insensibles, porque no sienten todo aquello que las personas sin psicopatía sienten.
“Un psicópata no tiene nunca amigos, tiene súbditos, conocidos o esclavos”.
-Vicente Garrido Genovés.
Comportamiento fantástico y poco recomendable (con o sin bebida)
Siguiendo con los criterios de Cleckley para la psicopatía, este habló de un comportamiento fantástico, como alejado de la realidad. Según él, dicho comportamiento se da siempre (con o sin consumo de alcohol).
Amenazas de suicidio raramente llevadas a cabo
Según Cleckley, aparecen estas amenazas de suicidio que nunca se llevan a cabo. Quizás para llamar la atención o para movilizar al entorno.
Vida sexual impersonal, trivial y pobremente integrada
Sus dificultades emocionales se trasladan al terreno sexual, haciendo que tengan relaciones sexuales impersonales y triviales, y que sean incapaces de integrar esta experiencia como parte de su vida.
Fracaso para seguir un plan de vida
Cleckley también habla de una gran dificultad en los psicópatas para seguir un plan de vida “normativo”, aunque con los años se ha visto que esto sí pueden conseguirlo.
¿Cómo es un psicópata según Hare? El PCL-R
Hare es otro pionero en el campo de la psicopatía, un psicólogo canadiense nacido en 1934, doctor en Psicología e investigador muy reconocido en el campo de la psicología criminal.
En 1990, Hare elaboró uno de los instrumentos más utilizados para la evaluación e investigación en psicopatía. Denominó a su instrumento “Revised Psychopathy Checklist” (PCL-R). A través de este instrumento, podemos conocer también cuáles son las características fundamentales de una persona con psicopatía.
La PCL-R está formada por 20 ítems agrupables en dos factores: 1) componentes interpersonales o afectivos del trastorno (lo que bautizó como desapego emocional) y 2) desviación social (que hace referencia al estilo de vida inestable y antisocial).
Desapego emocional
Dentro de este factor encontramos una serie de ítems (algunos similares a los criterios propuestos por Cleckley), que nos permiten conocer un poco más cómo piensa y actúa una persona con psicopatía:
- Locuacidad/encanto superficial.
- Sensación grandiosa de autovalía.
- Engaño y mentiras patológicas.
- Dirección/manipulación.
- Ausencia de remordimiento y culpabilidad.
- Escasa profundidad en los afectos.
- Insensibilidad/falta de empatía.
- Fracaso para aceptar la responsabilidad de sus actos.
Estilo de vida inestable y antisocial
A su vez, dentro del segundo factor que hace referencia al estilo de vida de la persona, encontramos los siguientes ítems:
- Necesidad de estimulación.
- Estilo de vida parasitario.
- Escasos controles conductuales.
- Problemas de conducta tempranos.
- Falta de metas realistas a largo plazo.
- Impulsividad.
- Irresponsabilidad.
- Delincuencia juvenil (¡pero no todos los psicópatas son delincuentes!).
- Revocación de la libertad condicional.
El modelo de Hare: similar a la CIE y a Cleckley
Es importante saber que los criterios de la CIE-10 (Clasificación Internacional de Enfermedades) para la psicopatía se asemejan a los ítems de la PCL-R, propuestos por Hare. Además, como hemos podido ver, también son similares a la concepción original de la psicopatía propuesta por Cleckley.
Causas de la psicopatía
Hemos visto cómo piensa y actúa un psicópata, pero ¿sabemos por qué alguien se convierte en psicópata? ¿Psicópata se nace o se hace? Se han planteado múltiples modelos para explicar el por qué una persona es psicópata.
Múltiples causas implicadas
Estos modelos hacen referencia a una visión tanto neurofisiológica como bioquímica o psicosocial. Hasta la fecha, los modelos causales más relevantes de la psicopatía son los que plantean:
- Disfunción del lóbulo frontal: que se manifiesta con un fracaso en suprimir, modificar y eliminar respuestas que han dejado de ser adaptativas.
- Inmadurez cortical: en la psicopatía se observa un empleo inusual del lenguaje, que supone un papel reducido en la mediación y regulación de la conducta.
- Disminución de actividad serotoninérgica: se ha relacionado con las conductas impulsivas del psicópata, con su incapacidad para responder al castigo y con una alteración emocional.
- Baja activación cortical y necesidad de estimulación: esto facilitaría la adquisición de patrones conductuales delictivos.
- Déficit en el aprendizaje de evitación conductual: existe un déficit en la anticipación y condicionamiento de las respuestas de miedo.
- Déficit en los mecanismos de inhibición conductual: según Gray (1983), la psicopatía es el resultado de un fuerte sistema de activación conductual y un débil sistema de inhibición conductual.
Socialización, ambiente y familia
A nivel de socialización y de prácticas relacionadas con el ambiente familiar y la educación, encontramos:
- Influencia de las prácticas de socialización: según Gough (1948), a partir del ambiente familiar se desarrolla un déficit en la asunción de roles y una incapacidad para situarse en el punto de vista del otro.
- Influencia del ambiente familiar: McCord (1983) sugiere que el rechazo parental y la inconsistencia en el castigo podrían estar en la base de la psicopatía.
Un trastorno muy complejo
Como hemos visto, la psicopatía es un trastorno complejo, que en la actualidad se vincula al trastorno antisocial de la personalidad. En su etiología intervienen factores de todo tipo, y aún queda mucho por investigar en este terreno.
Por otro lado, es importante empezar a derribar mitos y estereotipos asociados a la psicopatía, porque ni todos los psicópatas son delincuentes ni todos los delincuentes son psicópatas (¡ni mucho menos!).
- American Psychiatric Association –APA- (2014). DSM-5. Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales. Madrid: Panamericana.
- Belloch, A.; Sandín, B. y Ramos, F. (2010). Manual de Psicopatología. Volumen I y II. Madrid: McGraw-Hill.
- Bermúdez, J. (2003). Psicología de la personalidad. Teoría e investigación (vol. I y II). Madrid: UNED
- Cooke, D. J., Hart, S. D., Logan, C., & Michie, C. (2012). Explicating the Construct of Psychopathy: Development and Validation of a Conceptual Model, the Comprehensive Assessment of Psychopathic Personality (CAPP). International Journal of Forensic Mental Health, 11(4): 242 - 252.
- Marcus, David K.; John, Siji L.; Edens, John F. (2004). «A Taxometric Analysis of Psychopathic Personality». Journal of Abnormal Psychology 113(4): 626-35.
- Mills, Jeremy F.; Kroner, Daryl G.; Morgan, Robert D. (2011). "Psychopathic Traits". Clinician's Guide to Violence Risk Assessment. Nueva York: Guilford Press.