7 causas del sabor metálico en tu boca
El sabor metálico en la boca, conocido en el entorno médico como parageusia o disgeusia (y que se aplica también a otros sabores), es una experiencia muy común que afecta a millones de personas. La mayor parte del tiempo se relaciona con la higiene bucal, aunque diversas condiciones pueden provocar el mal sabor en la boca. Hoy recopilamos 7 causas del sabor metálico en tu boca y qué hacer al respecto.
Los expertos alertan que las malas experiencias en relación con el gusto pueden derivar en la falta de placer al comer, la aversión por la comida e incluso en la desnutrición. Ciertamente, el sabor metálico en la boca puede impedir que una persona disfrute de los alimentos y por tanto reduzca las cantidades que ingiere en su dieta. Veamos qué hábitos y condiciones están detrás y qué dicen los científicos.
Principales causas del sabor metálico en tu boca
El sabor metálico en la boca puede aparecer de forma repentina o manifestarse de manera permanente. Dado que este sentido está muy relacionado con el del olfato, con frecuencia la sensación también afecta la percepción de olores en la nariz. Aquí te explicamos algunas causas.
1. Mala salud bucal
Tal y como señalan los especialistas, los cambios en la percepción del gusto suelen originarse debido a la deficiencia en la salud bucal. En efecto, quienes no se cepillan adecuadamente al menos 3 veces al día, no usan enjuague bucal, hilo dental y otros hábitos básicos pueden desarrollar alteraciones en la manera en que sus papilas gustativas interpretan los sabores.
Todas las personas tienen millones y millones de bacterias en la boca (dientes, lengua, mejillas y encías). La higiene bucal ayuda a controlar su población, de manera que cuando esta es deficiente el número puede aumentar exponencialmente. Los procesos metabólicos de las bacterias liberan compuestos que alteran el pH y que en su conjunto pueden ocasionar sabor metálico en la boca.
2. Ingesta de medicamentos
Fármacos como los antimicóticos, los antibióticos, los antiinflamatorios, los inmunosupresores y los medicamentos psiquiátricos pueden general sabor metálico en la boca. Los expertos y los investigadores señalan además que los fármacos usados para tratar el cáncer suelen general alteraciones de este tipo al momento de percibir los sabores.
En general, este efecto secundario suele manifestarse con tratamientos a medio o largo plazo; y son poco frecuentes ante ingestas de solo un par de días. Si se trata de una incomodidad que afecta de manera directa tu bienestar, considera hablar con tu especialista para cambiar el medicamento. En muchos casos esto es posible, así que no te cohíbas en conversarlo con tu médico.
3. Procesos de indigestión
Los procesos de indigestión se asocian al reflujo ácido y la acidez estomacal. Todas estas condiciones pueden hacer que los gases, la comida o los ácidos estomacales afecten a tu sistema gastrointestinal superior; esto es, el esófago, la faringe y la boca. Como consecuencia muchas personas manifiestan alteraciones en su gusto, como por ejemplo un sabor metálico persistente.
Si esta es la causa desarrollarás otros síntomas como hinchazón abdominal, ardor en el pecho, regurgitación de alimentos, sensación de nudo en la garganta, náuseas y problemas para tragar. Estos episodios son muy comunes, y medicamentos o algunos hábitos de vida los pueden controlar. Por ejemplo, evitar alimentos picantes, comidas copiosas, beber agua con los alimentos y evitar acostarse inmediatamente después de comer.
4. Consumir micronutrientes en forma de suplementos
Los suplementos de zinc, calcio, hierro y otras vitaminas y nutrientes pueden alterar temporalmente el gusto. Los adultos mayores o las mujeres embarazadas suelen interactuar con mayor frecuencia con estas sustancias. Por tanto, estos grupos son propensos a desarrollar sabor metálico en la boca.
Por paradójico que resulte, la deficiencia de algunas de estas vitaminas puede generar también alteraciones de este tipo. Se sabe que la deficiencia de zinc ocasiona trastornos del gusto, por ejemplo.
5. Problemas de los senos paranasales
El sentido del olfato y el sentido del gusto están muy relacionados. Por tanto, los problemas en los senos paranasales se cuentan entre las causas del sabor metálico en tu boca. Entre muchos otros, destacamos la congestión nasal, los cornetes agrandados, las infecciones del oído medio, el tabique desviado, la sinusitis e incluso las alergias y el resfriado.
6. Embarazo
Los primeros síntomas del embarazado son muy variados. La mayoría de las personas asocian el principio del embarazo con náuseas, vómitos, sensibilidad en las mamas y antojos. Sin embargo, el espectro de signos es muy amplio; y no todas las embarazadas lo desarrollan. El sabor metálico en la boca en estos casos está relacionado con los cambios hormonales del momento.
De hecho, y tal y como señalan los expertos, en condiciones normales las hormonas masculinas y femeninas modulan el procesamiento del gusto en el cerebro. Durante el embarazo se produce una mayor cantidad de progesterona, de manera que durante el primer semestre puede manifestarse este síntoma.
7. Enfermedades neurológicas
Entre las condiciones neurológicas destacamos la enfermedad de Parkinson, la demencia, la enfermedad de Alzheimer y la esclerosis múltiple. La relación entre estas y el sabor metálico en la boca ha sido señalada por los expertos desde hace tiempo. Este síntoma puede anticipar los primeros indicios de estas enfermedades, o pueden manifestarse mucho tiempo después.
Hay muchas otras causas del sabor metálico en tu boca. Te dejamos así con otros posibles catalizadores de esta alteración del gusto:
- Diabetes.
- Alergias alimentarias.
- Lesiones en la boca que produzcan sangrado.
- Síndrome de boca ardiente.
- Enfermedad de las encías.
- Insuficiencia renal.
- Interacción con el tabaco y el alcohol.
- Interacción con drogas recreativas.
- Envejecimiento natural (reducción de las densidad de las papilas gustativas).
- Enfermedades virales.
- Ingesta de alimentos específicos.
- Uso de aparatos orales.
- Interacción con productos químicos.
- Trastornos genéticos.
A pesar de todas estas causas del sabor metálico en tu boca, lo cierto es que la mayoría de los casos se pueden explicar por los desencadenantes analizados. Entre estos la mala higiene bucal suele explicar la mayoría de los episodios, de manera que revisa qué tan cuidadoso has sido al respecto.
Si el sabor persiste a pesar de hacer algunos cambios en tu higiene y además manifiestas otros síntomas, no dudes en consultar con un profesional.
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