¿Qué son los sueños lúcidos?
El término sueños lúcidos se utiliza para aludir a las experiencias en las que una persona es consciente del hecho de que está soñando. Su popularidad no ha dejado de aumentar los últimos años, en parte debido a la influencia de los videojuegos y de las películas de ciencia ficción (como Inception, por solo nombrar alguna). No se trata de una experiencia frecuente, al menos no así en la mayoría de los casos.
De acuerdo con algunas estimaciones, hasta el 55 % de las personas han experimentado sueños lúcidos al menos una vez. Ha habido un creciente interés por intentar entrenar la habilidad, en principio por supuestos beneficios a nivel cognitivo. El interés científico por este tipo de sueños es relativamente reciente, ya que hasta hace muy poco se consideraba un área esotérica.
Breve historia de los sueños lúcidos
La terminología sueño lúcido se introdujo por primera vez en 1913 de la mano del psiquiatra holandés Frederik Van Eeden. Los describió de la siguiente manera: «La reintegración de las funciones psíquicas es tan completa que el durmiente recuerda la vida diurna y su propia condición, alcanza un estado de perfecta conciencia, y es capaz de dirigir su atención y de intentar diferentes actos de libre voluntad».
Por supuesto, las experiencias en las que una persona es consciente dentro del sueño de que está soñando no es nueva. Episodios de este tipo los describe Aristóteles en su tratado Sobre los sueños y muchos tratados de culturas orientales los mencionan con frecuencia. A pesar de ello, siempre hubo una reticencia por parte de la comunidad científica hacia ellos. Esto se debe a la falta de evidencia al respecto y lo poco frecuente que eran las experiencias para estudiarlas.
No fue hasta finales de la década de 1970 y principios de 1980 que surgieron los primeros estudios que avalaron la existencia de ellos. Los más importantes fueron la tesis doctoral de Hearne en 1978 titulada Lucid dreams: an elecro-physiological and psychological study; y el trabajo de La Berge y su equipo de 1981 Lucid dreaming verified by volitional communication during REM sleep. Ambos fueron el punto de partida para el desbordante interés por parte de los científicos.
Características de los sueños lúcidos
Como ya se ha explicado, un sueño lúcido ocurre cuando una persona está dormida, pero consciente de que está soñando. Los expertos piensan que surgen de sueños no lúcidos en la fase del sueño REM. La fase REM, también conocida como sueño de movimientos oculares rápidos, es uno de los dos estados del sueño que se caracterizan por un aumento de la actividad cerebral, la respiración, la presión arterial y la frecuencia cardíaca. En ella ocurren la mayoría de los sueños.
Los sueños lúcidos no son una experiencia frecuente. De hecho, se estima que solo el 11 % de las personas en todo el mundo manifiesta dos o más sueños lúcidos al mes. El estudio de ellos se hace a través de los movimientos oculares voluntarios registrados en un electrooculograma durante un examen de polisomnografía. La técnica consiste en pedirle a los participantes que señalen con los ojos bajo parámetros específicos (arriba, abajo, izquierda o derecha) cuando adquieren lucidez en sus sueños.
Dado que el soñador es consciente de que está soñando, la mayor parte del tiempo puede operar a voluntad su entorno. El control que se hace dentro del sueño no siempre es total, aunque el sujeto puede modificar a voluntad gran parte de las cosas que ocurren dentro de él. Se han descrito como un estado híbrido entre el sueño y la vigilia.
¿Hay beneficios de tener sueños lúcidos?
Durante los últimos años la autoinducción de los sueños lúcidos ha cobrado gran popularidad. Esto ha motivado la aparición de programas y cursos cuya intención en enseñar a los participantes a inducir sueños de este tipo. Muchos de estos programas afirman que aprender a generar sueños lúcidos es beneficioso para la salud. ¿Qué tanta verdad hay detrás de esta afirmación?
Algunos expertos han relacionado a los sueños lúcidos con una mejor valoración subjetiva de la salud mental, una mayor autonomía y autoestima. También se han asociado con una mayor creatividad, y existen indicios de que pueden ser útiles para aumentar la resiliencia luego de una experiencia traumática. Pese a ello, no existe un consenso actual sobre sus beneficios y desde algunos círculos incluso se incentiva a no practicarlos.
Un trabajo publicado en Frontiers in Psychology en 2018 encontró que, en contraste con las aseveraciones anteriores, los sueños lúcidos se asocian con estados mixtos de sueño y vigilia, que están relacionados a su vez con cogniciones extrañas, estrés y psicopatología. Pero esto no todo. Dado que muchos buscan desesperadamente tener sueños de este tipo, las técnicas utilizadas podrían generar trastornos del sueño.
Se ha sugerido que los sueños lúcidos pueden potenciar los síntomas psicóticos en pacientes diagnosticados, de manera que no se recomienda su uso como terapia para este y otros trastornos similares. No existe evidencia sustancial de que los sueños lúcidos sean buenos para la salud, y de hecho podrían tener un efecto contraproducente. Por todo esto, se desaconsejan las experiencias de este tipo.
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