Los síntomas del cáncer de mama
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2020 se diagnosticaron 2,3 millones de mujeres con cáncer de mama en todo el mundo. Ese mismo año hubo 685 000 fallecimientos por la causa. De manera que se trata de una de las variantes con mayor prevalencia. Conocer los síntomas del cáncer de mama es de ayuda para aumentar la esperanza de vida.
Por desgracia, muchos signos no son evidentes hasta que la enfermedad ha alcanzado sus etapas más severas. Aunque sí existen algunos distintivos que alertan de un posible problema.
Si bien es más común a medida que se envejece, la evidencia indica que el 7 % de las mujeres lo desarrollan antes de los 40 años. Descubre cómo detectarlo con base en sus síntomas.
Principales síntomas del cáncer de mama
Las investigaciones nos han hecho saber que el cáncer de mama es la principal causa de muerte en las mujeres. La mayoría de las veces no produce síntoma alguno, al menos hasta estar en sus etapas avanzadas.
Los signos más evidentes se manifiestan a través de cambios en la apariencia de los senos, aunque es importante tener en cuenta, siguiendo al National Cancer Institute, que la mayoría de estos cambios generados no están relacionados con el cáncer. Solo un diagnóstico médico puede corroborar la enfermedad.
Hay que considerarlo en caso de detectar lo siguiente:
- Bulto o sensación de bulto en el seno o en la axila no detectado con anterioridad.
- Secreciones en el pezón o cambios en su color o textura.
- Superficie de la piel enrojecida, seca, con picazón e inflamada.
- Sensibilidad en el área de la mama.
- Dolor focalizado en el pezón y cambios en su apariencia. También se pueden presentar inversiones de los pezones.
- Orificios en la superficie de la mama.
Como bien nos recuerdan los Centers for Disease Control and Prevention (CDC), los síntomas del cáncer de mama también se comparten con otras afecciones no relacionadas a lo oncológico. Es común que la mama atraviese cambios a lo largo del tiempo, en especial al acercarse la menopausia. A pesar de ello, los signos deben ser considerados como señales de alerta y no pueden ser omitidos por ningún paciente.
Síntomas raros del cáncer de mama
Las síntomas del cáncer de mama reseñados en el apartado anterior son los más frecuentes durante el desarrollo de la enfermedad. Recuerda que existen varios tipos de cáncer de mama. Algunos se han estudiado parcialmente debido a que son poco comunes.
Entre los signos raros destacamos los siguientes:
- Secreciones sanguinolentas por el pezón.
- Picazón en la superficie de la mama. Por lo general no se alivia con cremas, medicamentos, frío u otros agentes externos.
- Temperatura elevada en el área de la mama, en relación con otras partes del cuerpo.
- Cambios en el color de la piel cerca del seno. El espectro suele ser variado, aunque se mantiene entre el rojo y el nacarado.
- Aumento del tamaño de los senos (no relacionado con la pubertad o con subidas de peso repentinas).
- Úlceras graves que se resisten a su curación.
A pesar de que son poco frecuentes, las mujeres deben tenerlos en cuenta durante el autoexamen de mama. Descubrirlos puede hacer una diferencia gigante para el posterior tratamiento.
Aunque solo ocurre en raras ocasiones, el cáncer de mama en hombres presenta los mismos síntomas que en las mujeres. Por tanto, estos también deben estar atentos a ellos, aún cuando solo representen un par de miles de diagnósticos en la actualidad, según datos de la American Cancer Society.
Complicaciones del cáncer de mama por metástasis
Es posible que surjan signos complementarios a los ya mencionados si el cáncer de mama ha evolucionado a otra etapa. Lo más preocupante son las metástasis.
Cuando esto ocurre surgen complicaciones, de modo que es difícil determinar patrones generales sobre las señales de alerta. Sin embargo, lo más usual es que haya falta de apetito, dolores de cabeza, fatiga, dificultad para respirar, dolores óseos y entumecimiento de las extremidades.
Según sabemos, la mayoría de los cuadros metastásicos del cáncer de mama se presentan en un área local o regional, afectando en principio a los ganglios linfáticos y a la pared torácica. Cuando se desarrollan metástasis a la distancia, las principales zonas afectadas son los huesos, el pulmón, el hígado y el cerebro.
La presencia de estos síntomas condicionan la calidad de vida, de modo que se tratan de signos de alerta evidentes. Por desgracia, ocurren cuando la esperanza de vida luego del diagnóstico es significativamente menor. He aquí la importancia de saber buscar asistencia médica.
¿Cuándo buscar asistencia médica?
A partir de los 40 años aumentan las probabilidades de padecer cáncer de mama. Las mujeres que se encuentran en este grupo etario deben comenzar con el rastreo rutinario, así como hacerse un autoexamen de mama una vez al mes. Así nos lo recuerda la National Breast Cancer Foundation.
El autoexamen ayuda a que las mujeres se familiaricen con la forma y tamaño de sus senos, de modo que les sea más fácil identificar una posible anomalía. Si existe un antecedente familiar de cáncer de mama se sugiere que los autoexámenes empiecen más temprano, alrededor de los 20 años.
Como ya hemos apuntado, no todos los bultos se asocian con cáncer de mama. Los estudios indican que un retraso de solo 3 meses puede condicionar el pronóstico médico.
En caso de que tengas dudas al respecto de falsas alarmas identificadas por un médico y formes parte de los grupos de riesgo, no está de más que intentes buscar una segunda opinión. Familiarizarse con los síntomas del cáncer repercute de manera positiva en el posterior diagnóstico y tratamiento de la enfermedad.
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