Síntomas de las arritmias cardíacas
Ante todo, debemos saber que los signos y síntomas de las arritmias cardíacas varían de una persona a otra. Aún así, hay varios aspectos que debemos tener en cuenta y que comentaremos a continuación.
Aunque solemos pensar en las arritmias solo como aceleraciones del ritmo del corazón, lo cierto es que no comprenden tal variación únicamente. En realidad, las arritmias cardíacas son alteraciones en la secuencia de los latidos. Por lo que pueden ser aceleraciones (taquicardia) o enlentecimientos (bradicardia). También irregularidades.
En líneas generales, las arritmias se producen como consecuencia de trastornos en el corazón o en órganos que inciden en él. Así, entre las causas comunes tenemos las siguientes:
- Enfermedades cardíacas congénitas.
- Insuficiencia cardíaca o agrandamiento del corazón.
- Hipertiroidismo.
- Ataque cardíaco o infartos.
- Niveles anormales de potasio en la sangre.
Por otro lado, las arritmias pueden ser consecuencia del consumo de algunos medicamentos y de malos hábitos de vida, como el tabaquismo y el consumo de drogas ilegales. También vale tener en cuenta que hay casos en los que no es posible identificar una causa concreta.
Síntomas comunes de las arritmias
La percepción de los latidos del corazón varía de una persona a otra. Así como para algunos son evidentes, otros solo los perciben en determinadas circunstancias, como cuando se acuestan sobre su lado izquierdo.
Por lo tanto, hay personas conscientes de que tienen palpitaciones y otras que no se dan cuenta hasta que se hacen un chequeo médico. Como indica el Manual MSD, una arritmia puede estar siempre o ser intermitente. En este sentido, se pueden o no sentir los síntomas. También sucede que se hacen más notorios en la actividad física.
Por lo general, las arritmias que no tienen una causa subyacente grave pueden producir varias molestias (más o menos intensas), mientras que las potencialmente letales se hacen presentes sin un síntoma previo claro.
Algunos de los signos con los que pueden cursar las arritmias son los que vamos a comentar. Cabe destacar que todos pueden presentarse como consecuencia de las dificultades que tiene el corazón para bombear sangre al organismo de manera eficaz.
Palpitaciones
Uno de los síntomas de las arritmias cardíacas son las palpitaciones, que se perciben como anormales. Se puede notar el ritmo cardíaco más acelerado (taquicardia) o más lento de lo normal (bradicardia).
O bien puede notarse irregular o intermitente. Por otra parte, la intensidad también es variable de acuerdo a la percepción. Es posible notar latidos fuertes, como si golpearan el pecho desde dentro.
Mareos
Si estás de pie o estás realizando una actividad mientras tienes una arritmia, es probable que te marees. Esto sucede porque se reduce la llegada efectiva de sangre al cerebro. El mareo es un síntoma que se suele resolver tomando la posición acostada o sentándose.
Desmayos o síncopes
Cuando el cerebro no recibe suficiente oxígeno por las dificultades que tiene el corazón para funcionar como debería, la persona puede desmayarse. Esto es una señal de que la arritmia es peligrosa y que es necesario un tratamiento médico inmediato.
Si se pasa del mareo al desmayo es porque la circulación sanguínea se ve afectada en demasía y la reducción del aporte de oxígeno al cerebro está en niveles de alarma. En los casos agudos se requiere un abordaje de urgencia; por otro lado, si hay desmayos a repetición, en la consulta el profesional buscará elementos que delaten problemas subyacentes.
Otros síntomas de las arritmias cardíacas
Otros síntomas de las arritmias cardíacas, menos frecuentes, son los siguientes:
- Fatiga.
- Confusión.
- Sudoración.
- Dolor en el pecho.
- Dificultad para respirar.
- Baja tolerancia al ejercicio.
Posibles complicaciones
Como recogen varias fuentes, durante una arritmia es posible que el corazón lata demasiado lento o a gran velocidad. Pero la situación más preocupante es que deje de latir.
Cuando el corazón desarrolla una arritmia en la que deja de latir estamos ante un paro cardíaco. Por ello mismo, una de las principales causas de muerte súbita en este grupo de pacientes es la detención de la actividad del órgano.
Se han estudiado las implicancias de la genética en los casos de muerte súbita cardiogénica por arritmias. Los resultados apuntan a que ciertos pacientes tienen cambios por mutaciones en la expresión de canales que trasportan calcio en el músculo del corazón. Esto explicaría muchas de las arritmias sin causa aparente.
¿Cuándo buscar asistencia médica?
Ante cualquiera de los síntomas de las arritmias cardíacas que generen inquietud, molestias significativas en el día a día o ambas, lo mejor será acudir a consulta médica para un chequeo. Si bien es cierto que hay arritmias que no son motivo de preocupación, hay otras en las que sí es necesario establecer un control y un tratamiento riguroso.
En cualquier episodio de mareos y desmayos sin explicación evidente hay que acudir a los profesionales de la salud. La búsqueda de causas subyacentes se impone para evitar la progresión a cuadros que son letales, como el paro cardíaco.
Siempre consultar con un médico
Si el médico pauta un tratamiento para la causa de una arritmia, será imprescindible seguirlo para que los síntomas mejoren. También es de vital importancia cumplir con todas las recomendaciones en lo que respecta a los hábitos de vida y autocuidados. Cuanto más se atienda a esto, menor riesgo de consecuencias para la salud podrá haber.
Por supuesto, ante cualquier duda que pueda surgir en cualquier momento del tratamiento, lo más recomendable será consultar con el especialista. A veces se requieren pequeños ajustes de la terapéutica si se nota que no hay resultados en la disminución de los signos y los síntomas.
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