¿Qué es la fluorosis dental?: síntomas y tratamiento

El exceso de fluoruros durante la formación de los dientes puede originar una alteración en el esmalte llamada fluorosis dental. Descubre de qué se trata este problema oral.

Escrito y verificado por la odontóloga Vanesa Evangelina Buffa.

Última actualización: 19 julio, 2023

La fluorosis dental es una condición que afecta la estructura y apariencia del esmalte dental. Sucede por la exposición excesiva al flúor durante el desarrollo de las piezas dentarias.

Las consecuencias estéticas que caracterizan a este cuadro suelen ser motivo de preocupación para algunas de las personas que lo padecen. Por esta razón, existen tratamientos que se utilizan para mejorar la apariencia de las piezas con fluorosis.

Aunque el flúor es un gran aliado a la hora de proteger los dientes contra las caries, su uso desmedido en ciertas edades puede conducir a la fluorosis. En este artículo exploraremos en detalle todo lo que debes saber sobre esta alteración en el esmalte dental.

¿Qué es la fluorosis dental?

Según un artículo del Biological Trace Element Research, la fluorosis dental es un trastorno del desarrollo causado por la interacción con niveles supraóptimos de fluoruro durante la primera infancia. La exposición excesiva al flúor durante la maduración del esmalte da como resultado alteraciones en la mineralización y aumento de su porosidad.

Los defectos varían entre finas líneas blancas horizontales, opacidades, decoloraciones, manchas y hasta hoyuelos de varios tamaños. La gravedad y extensión del daño se correlaciona con la cantidad y el tiempo de exposición al fluoruro.

Aunque no es lo más habitual, en casos severos, las afecciones dentales puede acompañarse de fluorosis esquelética. La bibliografía indica que en estos casos puede haber daños en los huesos y afecciones en el sistema nervioso, cardiovascular y endocrino.

El flúor es un mineral natural que se encuentra en el agua potable, algunos alimentos y en productos de cuidado dental, como pastas y enjuagues bucales. Cuando se consume en cantidades adecuadas, este elemento es beneficioso para la salud oral, ya que fortalece los dientes y previene la caries. Sin embargo, su ingesta excesiva durante el desarrollo de las piezas dentarias altera la estructura del esmalte.

Según las estadísticas, la prevalencia mundial de fluorosis dental está aumentando. De acuerdo con estimaciones, en los Estados Unidos el 23 % de la población total sufre esta alteración, y la cifra asciende al 41 % en la población adolescente.

Causas de la fluorosis

Como ya mencionamos, el origen de la fluorosis dental es la exposición prolongada a cantidades exageradas de flúor en las etapas de formación de los dientes. La alteración en la estructura del esmalte sucede mientras las piezas dentarias se están desarrollando en el interior del hueso, antes de que aparezcan en la boca. Según la Academia Americana de Pediatría, esto es antes de los 8 años de edad. Aunque puede variar entre niños.

Son varias las situaciones que pueden llevar a que los niños consuman este mineral en exceso durante el desarrollo de sus piezas dentarias:

• Beber de manera habitual agua con altas concentraciones de fluoruro, superiores a 1.5 partes por millón (ppm). Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) recomiendan buscar otras fuentes de agua cuando los niveles naturales de flúor superan las 2 ppm.
• Tomar suministros de flúor cuando no son necesarios o en cantidades superiores a las recetadas.
• Uso inadecuado de productos dentales que contienen flúor, como pastas de dientes y enjuagues bucales. Tragar o utilizar demasiada pasta dental son prácticas que pueden provocar estos defectos en el esmalte.

¿Cuáles son los síntomas de la fluorosis dental?

Las manifestaciones de la fluorosis dental varían según la gravedad de la afección. Según la bibliografía, estos son los diferentes tipos de fluorosis y los síntomas que caracterizan cada caso:

• Cuestionable: el esmalte muestra ligeros cambios en la traslucidez, que van desde unas pocas manchas blancas o puntos dispersos.
• Muy leve: se observan pequeñas áreas blancas, opacas y dispersas que ocupan menos del 25 % de la superficie del diente.
• Leve: los dientes presentan manchas blancas dispersas o finas líneas parecidas a la tiza que ocupan menos del 50 % del diente.
• Moderada: se caracteriza por la presencia de manchas de tonalidades blancas o marrones que afectan más del 50 % del esmalte dental.
• Severa: se observan grandes manchas blancas, amarillas o marrones que ocupan la mayor parte del diente. Además, pueden observarse hoyos o rugosidades en el esmalte. Estas alteraciones aumentan el riesgo de sufrir caries o sensibilidad dental.

Por lo tanto, la principal consecuencia de la fluorosis es la alteración estética que provoca. De todos modos, en los casos más severos, aumenta también la predisposición a las caries y a sufrir sensibilidad.

¿Qué es la fluorosis endémica?

Tal y como se advierte en Endemic Disease in China, la fluorosis endémica afecta a las personas que viven en una región con altos niveles de flúor en el agua potable. También, en zonas donde este mineral está presente en los alimentos o en el aire. Países como China e India recogen los casos más graves de este tipo de fluorosis.

Como ya se reseñó, las concentraciones de fluoruro en el agua potable por encima de 1,5 mg/L aumentan el riesgo de la condición. Cantidades más altas elevan los riesgos de fluorosis esquelética. Dada la interacción constante con el mineral a la que se exponen las personas que viven en zonas endémicas, las consecuencias en su salud son mayores.

Según un artículo publicado en el Journal of Cellular and Molecular Medicine, la ingestión de cantidades excesivas de fluoruro puede causar daños en varios sistemas u órganos del cuerpo. Las principales manifestaciones clínicas se presentan como fluorosis dental, fluorosis esquelética y otros síntomas en tejidos no esqueléticos causados por acumulación excesiva de flúor.

A nivel bucal, la fluorosis endémica provoca manchas más pronunciadas en los dientes, áreas de erosión del esmalte y, en casos graves, problemas en la estructura y la resistencia de las piezas dentarias. En el caso de los huesos, la fluorosis esquelética incluye síntomas como rigidez y dolor en las articulaciones, alteración de la estructura ósea y calcificación de los ligamentos.

Otras condiciones asociadas con la ingesta excesiva de flúor incluyen parálisis, complicaciones respiratorias, presión arterial baja, pérdida de peso, anorexia, anemia y caquexia.

Tratamiento de la fluorosis dental

La fluorosis dental es una situación irreversible, ya que el daño causado en el esmalte dental no se puede eliminar por completo. Sin embargo, existen tratamientos que mejoran la apariencia estética de los dientes afectados.

Es importante destacar que la fluorosis dental no empeora con el tiempo y, en general, no causa complicaciones graves para la salud bucal. De todos modos, los casos severos requieren una especial atención para prevenir el desarrollo de caries.

Para reducir la visibilidad de las manchas y lograr una sonrisa más estética, se pueden elegir alguno de los siguientes tratamientos:

• Blanqueamiento dental: se usa para mejorar la apariencia de los dientes en casos de fluorosis leves.
• Carillas: se trata de finas láminas de materiales estéticos que recubren las imperfecciones del esmalte.
• Coronas: luego de preparar el diente, se lo recubre con fundas que mejoran su apariencia.

El rol de los padres en la prevención de la fluorosis

Debido a que la fluorosis dental se origina en el momento en que se forman las piezas dentarias, es fundamental que los padres controlen el consumo de flúor de sus hijos. Por un lado, es necesario que los niños incorporen este mineral para prevenir las caries y, por otro, es imperioso cuidar que no haya una exposición excesiva.

Estas son algunas medidas a tener en cuenta para evitar el exceso de fluoruros durante la infancia:

• Averiguar las concentraciones de flúor del agua que se consume de manera habitual, En caso de que proceda, cambiar la fuente si los niveles superen las 1,5 ppm.
• No administrar suplementos de flúor en gotas o pastillas a menos que el odontólogo lo indique.
• Mantener fuera del alcance de los niños todos los productos que contengan flúor, como pastas de dientes y enjuagues bucales.
• Utilizar pastas dentales con flúor para niños y dosificar la cantidad recomendada para la edad del pequeño.
• Enseñar y motivar al niño a escupir la pasta de dientes después del cepillado en lugar de tragarla.

Recurrir al dentista

La fluorosis dental es una alteración en el esmalte de los dientes debido a una exposición excesiva al flúor durante la infancia. Si bien se trata de un defecto irreversible, existen procedimientos que permiten mejorar la apariencia de las piezas afectadas.

Si notas que tus dientes están manchados, sospechas que padeces fluorosis o tienes dudas sobre el uso del flúor, no dudes en consultar al odontólogo. Un dentista podrá confirmar el diagnóstico, recomendarte el tratamiento adecuado o brindarte pautas para prevenir este problema.