Etapas del melanoma

Conocer sobre el melanoma y sus etapas puede ayudar a prevenir y diagnosticar tempranamente este cáncer de piel. Te lo contamos a detalle.
Etapas del melanoma
Sandra Golfetto Miskiewicz

Escrito y verificado por la médico Sandra Golfetto Miskiewicz.

Última actualización: 01 agosto, 2021

Antes de hablar sobre las etapas del melanoma, se debe conocer que en la piel encontramos normalmente varios tipos de células. Entre ellas están las células basales, las células escamosas y los melanocitos.

Los melanocitos son células que producen melanina, un pigmento que protege contra los rayos ultravioletas (UV) y da color a la piel, el cabello y los ojos. A mayor cantidad de melanocitos más oscura será la piel, y es por esta razón que las personas de piel blanca son más propensas a desarrollar este tipo de tumor.

Cuando se desarrollan tumores benignos a partir de los melanocitos, se denominan nevus o lunares. Por el contrario, el tumor maligno que surge de los melanocitos, se denomina melanoma.

Los carcinomas de piel que se originan de las células basales y escamosas (carcinoma basocelular y escamoso, respectivamente) son más frecuentes que el melanoma. En este caso, si bien su frecuencia es del 4 % de todas las lesiones cancerosas en piel, también tiene una elevada mortalidad. Por tal motivo, extremar las medidas de diagnóstico precoz para recibir tratamiento oportuno es fundamental.

Otros términos importantes que debemos conocer

Existen términos que tu médico puede mencionar durante la consulta. El conocerlos facilitará el entendimiento sobre las etapas del melanoma. Estos son los siguientes:

  • Epidermis: es la capa de células más superficial de la piel.
  • Nevus: también conocido como lunares, son tumoraciones benignas de la piel. Generalmente, están presentes desde el nacimiento pero algunas pueden aparecer durante la adultez.
  • Biopsia: consiste en la toma de muestra de algún tejido (en este caso, la piel) para permitir al especialista examinar bajo el microscopio sus características, y determinar si se trata de una lesión benigna o maligna.
  • In situ: se trata del cáncer que no se ha esparcido más allá de una pequeña zona de piel.
  • Ganglio linfático centinela: es aquel que cumple la función de drenaje principal de tumor.
  • Metástasis microsatélites: metástasis cutáneas o subcutáneas microscópicas, que pueden ser adyacentes o distantes al melanoma primario.
  • Metástasis satélites: son aquellas dentro del sistema linfático a menos de 2 centímetros del melanoma.

Cómo detectar tempranamente un melanoma

Las etapas del melanoma pueden producir cambios evidentes en la piel
La autoexaminación de las lesiones atípicas en la piel permite acudir con más prontitud a la consulta médica. En ocasiones, esta pequeña costumbre puede salvar vidas.

Lo principal es buscar cualquier cambio nuevo o inusual en la piel, esté expuesta o no al sol. Los melanomas aparecen generalmente en las piernas (mujeres) y en el tronco (hombres). En personas de color, este tumor suele diagnosticarse más tardíamente, tener peor pronóstico y localizarse más frecuentemente en palmas, plantas y boca. Suele ser más frecuente en mayores de 80 años.

Diagnosticar un melanoma no es fácil. Solo el 30 % se desarrolla sobre un lunar previo y el 70 % puede desarrollarse sobre la piel normal. Por fortuna, existen algunas características muy particulares de estos tumores que facilitan su diagnóstico temprano. Te las contamos a continuación.

¿Nevus o melanoma? 

A través de la dermatoscopía, el dermatólogo buscará signos que ayuden a diferenciar una lesión benigna de una posiblemente maligna y poder definir la etapa el melanoma. Entre estas características se encuentran las siguientes:

  • A – Asimetría: a diferencia de los lunares, los melanomas suelen ser asimétricos, es decir, que si pasamos una línea imaginaria por el medio, sus dos mitades son diferentes.
  • B – Borde: son irregulares, extendidos u ondulados.
  • C – Color: los melanomas suelen tener distintos colores o tonos de un mismo color (rojo, negro, marrón, blanco, azul). Rara vez, algunos melanomas conocidos como amelanocíticos se observan más claros que la piel.
  • D – Diámetro: el tamaño es importante. Una lesión más grande de 6 milímetros suele ser sospechosa.
  • E – Evolución: las lesiones de piel no deberían cambiar constantemente. Un lunar que crece de tamaño o cambia de forma, color, elevación, o comienza a picar o sangrar debe ser evaluado por un médico.

A pesar de que el especialista evaluará al paciente y dará el diagnostico final, cada persona debe estar atento a estos cambios para acudir tempranamente a la consulta.

Estadificación o etapas del melanoma

Las etapas o estatificación del melanoma, permiten al médico decidir el plan de tratamiento y estimar el pronóstico. De esta manera, el doctor puede discutir con el paciente la conducta a seguir.

Sistema TNM

Antes de mencionar el estadiaje, debemos conocer qué es el sistema TNM. El American Joint Committee on Cancer (AJCC) clasifica a los diferentes tipos de cáncer (incluyendo el melanoma) según un sistema comúnmente usado, el sistema TNM, que se basa en las siguientes 3 características:

T – Espesor (thickness, en inglés)

Consiste en la profundidad que ha alcanzado la lesión en la piel. Esta se mide a través del índice de Breslow. Esta es una medida en milímetros desde la capa granulosa de la piel hasta el punto máximo de profundidad alcanzado por el melanoma en un ángulo recto con la epidermis.

Aunque existen muchos factores involucrados en la supervivencia de pacientes diagnosticados con melanoma, el grosor de la lesión en uno de los más importantes. A mayor grosor, peor es el pronóstico y viceversa.

La ulceración del melanoma también forma parte de esta categoría. Las úlceras son excavaciones que se producen sobre la piel, en este caso sobre el melanoma. Su presencia representa un mayor riesgo de propagación del cáncer.

N – Nódulos linfáticos

Los nódulos linfáticos son estructuras que forman parte del sistema inmunitario y del sistema que lleva la linfa a través del cuerpo. Al encontrarse distribuidos a lo largo de todo el organismo, muchas veces suelen ser el primer sitio de propagación de los tumores.

La presencia o no de nódulos linfáticos afectados circundantes al melanoma, determinará esta denominación. Existe una subcategoría denominada “en tránsito”, que consiste en la afectación de los nódulos linfáticos locales pero sin la propagación a nódulos linfáticos sistémicos.

M – Metástasis

Se trata de la metástasis o propagación del cáncer a otros nódulos linfáticos, a la piel adyacente o a los órganos. Los sitios más frecuentes de propagación son los siguientes:

  • Piel y tejido subcutáneo.
  • Pulmón.
  • Sistema nervioso central.
  • Hígado.
  • Hueso.

En la nueva clasificación de las etapas del melanoma del 2018, la AJCC ha introducido a esta categoría el uso de niveles de lactato deshidrogenasa (LDH). La LDH es una enzima que participa en la oxidorreducción (un tipo de reacción química) y se libera cuando existe daño a las células del cuerpo, como en el caso del cáncer.

Estadios y pronóstico del melanoma

Para el melanoma, se han establecido 5 estadios: 0, I, II, III, IV y V. A medida que aumenta el número, significa que el tumor se ha esparcido más en el organismo y tiene peor pronóstico. De acuerdo a esto, se agrupan en tres grandes conjuntos:

  • Etapa temprana: corresponde a estadios 0 y I.
    • Estadio 0: también llamado melanoma in situ, se limita a la capa superficial de la piel (epidermis).
    • Estadio I: el melanoma está localizado pero es invasivo, es decir, que se ha extendido hasta la siguiente capa de la piel (dermis) y mide < 1 milímetro según Breslow.
  • Riesgo intermedio a alto (loco-regional): el tumor ha invadido los ganglios o piel cercana al tumor. Corresponde al estadio II.
    • Estadio II: el melanoma alcanza una profundidad > 1 milímetro y puede o no estar ulcerada. Su riesgo de propagación a los ganglios regionales es alta, por lo que el medico puede solicitar biopsia del ganglio centinela.
  • Estadio avanzado (metastásico): el cáncer se ha difundido lejos del sitio donde se comenzó a desarrollar el melanoma. Corresponde a los estadios III y IV.
    • Estadio III: en este caso el grosor ya no es el factor determinante sino la propagación. El tumor se ha extendido a más de 2 centímetros del lugar de origen o alcanzado los ganglios linfáticos locales (metástasis microsatélites o satélites). Al examen físico estos ganglios pueden o no ser palpables.
    • Estadio IV: en este estadio final, hay afectación de múltiples nódulos linfáticos u otros órganos (pulmón, hígado, SNC, hueso o sistema gastrointestinal).

Clasificación final del melanoma

Las etapas del melanoma son algo complejas
Para determinar de forma adecuada la etapa del melanoma, el especialista deberá indicar varios estudios complementarios. Por ejemplo, la radiografía de tórax para valorar posibles metástasis pulmonares.

De esta forma, se le asigna un número a cada característica (T, N, M) y una letra (a, b, c, d) si existe una subcategoría. De manera que las etapas del melanoma llevarían la siguiente denominación según los hallazgos en cada paciente.

T – Espesor

  • TX: grosor no evaluable (por ejemplo, muestra de curetaje).
  • T0: sin evidencia de tumor primario (indeterminado o regresión completa de primario)
  • Tis: melanoma in situ.
  • T1a: < 0,8 milímetros de grosor sin ulceración.
  • T1b: < 0,8 milímetros de grosor con ulceración o 0,8 – 1,0 mm de grosor con o sin ulceración.
  • T2a: > 1,0 – 2,0 milímetros de grosor sin ulceración.
  • T2b: > 1,0 – 2,0 milímetros de grosor con ulceración.
  • T3a: > 2,0 – 4,0 milímetros de grosor sin ulceración.
  • T3b: > 2,0 – 4,0 milímetros de grosor con ulceración.
  • T4a: > 4,0 milímetros de grosor sin ulceración.
  • T4b: > 4,0 milímetros de grosor con ulceración.

N – Nódulos linfáticos

  • NX: no evaluable (procedimiento de estadiaje no realizado o nódulo removido previamente).
  • N0: sin metástasis regional.
  • N1a: 1 metástasis nodal, clínicamente oculta (sin metástasis en tránsito / satélite / microsatélites).
  • N1b: 1 metástasis nodal, clínicamente detectada (sin metástasis en tránsito / satélite / microsatélites).
  • N1c: negativo para metástasis nodal, clínicamente oculta (positivo para metástasis en tránsito / satélite / microsatélites).
  • N2a: 2 a 3 metástasis nodal, clínicamente ocultas (sin metástasis en tránsito / satélite / microsatélites).
  • N2b: 2 a 3 metástasis nodal, clínicamente detectadas (sin metástasis en tránsito / satélite / microsatélites).
  • N2c: 1 metástasis nodal, clínicamente oculta o detectada (positiva para metástasis en tránsito / satélite / microsatélites).
  • N3a: 4 o más metástasis nodal, clínicamente ocultas (sin metástasis en tránsito / satélite / microsatélites).
  • N3b: 4 o más metástasis nodal, clínicamente detectadas (sin metástasis en tránsito / satélite / microsatélites).
  • N3c: 4 o más metástasis nodal (positivas para metástasis en tránsito / satélite / microsatélites).

M – Metástasis

  • M0: sin evidencia de metástasis a distancia
  • M1a(0): metástasis a distancia en piel, tejidos blandos (incluyendo músculo) o ganglio linfático no regional + LDH no elevada.
  • M1a(1): metástasis a distancia en piel, tejidos blandos (incluyendo músculo) o ganglio linfático no regional + LDH elevada.
  • M1b(0): metástasis a pulmón + LDH no elevada.
  • M1b(1): metástasis a pulmón + LDH elevada.
  • M1c(0): metástasis a un órgano diferente al SNC + LDH no elevada.
  • M1c(1): metástasis a un órgano diferente al SNC + LDH elevada.
  • M1d(0): metástasis al SNC + LDH no elevada.
  • M1d(1): metástasis al SNC + LDH elevada.

El cuidado y la prevención es la clave

Presentar quemaduras de sol en 5 o más oportunidades entre los 15-20 años aumenta 80 % el riesgo de contraer melanoma y 70% de cáncer de piel no melanoma. Disminuir la exposición al sol en la playa y el uso constante de protectores solares puede ayudar a disminuir el riesgo de desarrollar cáncer de piel.

Cualquier nuevo nevus o mancha, cambio nuevo (dolor, crecimiento, prurito, inflamación) o inusual en una lesión, debe llevarlo a consultar con su dermatólogo a la brevedad posible. Si ha tenido melanoma, realice su chequeo regularmente con su dermatólogo, para un diagnóstico temprano de recurrencia de melanoma.



  • Blundo A, et al. Comparative Analysis of Diagnostic Techniques for Melanoma Detection: A Systematic Review of Diagnostic Test Accuracy Studies and Meta-Analysis. Front. Med.2021; 8:637069. doi: 10.3389/fmed.2021.637069
  • Naik P. Cutaneous Malignant Melanoma: A Review of Early Diagnosis and Management. World J Oncol. 2021;12(1):7-19. doi: https://doi.org/10.14740/wjon1349
  • Keunga E, Gershenwald J. The eighth edition American Joint Committee on Cancer (AJCC) melanoma staging system: implications for melanoma treatment and care. Expert Rev Anticancer Ther. August 2018; 18(8):775–784. doi:10.1080/14737140.2018.1489246.
  • PathologyOutlines.com [Internet]. LeBlanc R. Skin melanocytic tumor: Staging [actualizado 2019; cited junio 2021]. Disponible en: https://www.pathologyoutlines.com/topic/skintumormelanocyticmelanomastaging.html

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.