Signos y síntomas del autismo
El autismo es un trastorno del neurodesarrollo que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS ), afecta a 1 de cada 270 personas a nivel mundial. Los síntomas del autismo incluyen dificultades a nivel social y de comunicación, además de un patrón de intereses repetitivo y restringido.
Sin embargo, en algunos países la prevalencia podría ser mayor. Es el caso de Estados Unidos, con 1 de cada 59 niños afectados, según afirma un estudio de Málaga et al. (2019). Pero, ¿cuáles son los signos y síntomas del autismo que debemos conocer? ¿Cómo se manifiestan estas dificultades sociales y comunicativas? ¿Cuándo pedir ayuda? ¡Te lo contamos!
¿Qué es el autismo?
El autismo o trastorno del espectro del autismo (TEA), en realidad engloba una serie de trastornos con características en común. Según el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5), el autismo se define como un problema neurobiológico en el que aparecen deficiencias persistentes en la comunicación social y en la interacción social.
También hay patrones restrictivos y repetitivos de comportamiento, intereses o actividades. Los síntomas del autismo aparecen en las primeras fases del desarrollo, pero pueden no manifestarse en su totalidad hasta que la demanda social supera las capacidades limitadas.
También pueden estar enmascarados por estrategias aprendidas en fases posteriores de la vida. Dichos síntomas causan un deterioro importante en la persona, tanto en su área social como laboral y otras. No se explican mejor por una discapacidad intelectual o por un retraso global del desarrollo.
Síntomas del autismo más frecuentes
Existen dos grandes grupos de síntomas en el autismo:
- Los que tienen que ver con déficits en la comunicación social y en la interacción social.
- Los relacionados con patrones restrictivos y repetitivos de comportamiento, intereses o actividades.
Vamos a ver con más detalle qué síntomas encontramos en cada uno de estos dos grupos. Es decir, en el ámbito de la socialización y en el ámbito de los intereses o patrones restringidos.
1. Dificultades en la comunicación social y en la interacción
En este grupo de síntomas del autismo encontramos deficiencias en la reciprocidad socioemocional. Por ejemplo, un acercamiento social anormal, el fracaso de la conversación en ambos sentidos, la disminución del interés, las emociones o los afectos compartidos.
Puede aparecer también un fracaso en iniciar o en responder a interacciones sociales. Hay dificultades a nivel de la conducta comunicativa no verbal utilizada durante las interacciones sociales. Por ejemplo, una comunicación verbal y no verbal poco integrada, anomalías de contacto visual (no mirar a los ojos del interlocutor) y del lenguaje corporal.
También pueden aparecer dificultades a nivel de comprensión y del uso de gestos. Podría ser la falta total de expresión facial y de comunicación no verbal.
Otro de los síntomas del autismo es la dificultad a la hora de mantener y comprender las relaciones sociales. Esto se traduce en problemas para ajustar el comportamiento al contexto, para compartir juegos imaginativos o para hacer amigos, así como en ausencia de interés por otras personas.
2. Patrones restrictivos y repetitivos
Estos patrones restrictivos suceden en 3 niveles: de comportamiento, de intereses y de actividades. Esto se traduce en una serie de signos y síntomas, como movimientos, utilización de objetos o de habla estereotipada o repetitiva.
En este sentido, son niños que suelen manifestar estereotipias motoras simples. Por ejemplo, el clásico aleteo de las manos cuando están contentos o cuando están nerviosos. También en esta línea, son niños que tienden a alinear los juguetes cuando juegan.
Presentan ecolalias, que es la repetición de palabras y frases que han escuchado en la televisión o en otras personas. Las ecolalias se denominan también estereotipias verbales. Hacen uso de frases idiosincrásicas.
Inflexibilidad y pensamiento rígido
Otros síntomas del autismo que podemos encontrar en este grupo son la insistencia en la monotonía (les cuestan mucho los cambios), la excesiva inflexibilidad de rutinas o patrones ritualizados de comportamiento verbal o no verbal. Por ejemplo, pueden mostrar angustia frente a pequeños cambios.
Por otro lado, pueden presentar rituales a la hora de saludar, así como una necesidad de tomar el mismo camino cada día a la hora de ir a un lugar. O la necesidad de comer los mismos alimentos cada jornada.
Intereses restringidos
Sus intereses son muy restringidos y fijos. Pueden, por ejemplo, tener un fuerte apego o una preocupación excesiva por objetos inusuales. También tienen intereses circunscritos o perseverantes.
Hipo o hipersensibilidad a los estímulos
Aparece, en muchos casos, una hiper o hiporreactividad a los estímulos sensoriales. O un interés inhabitual por aspectos sensoriales del entorno.
Por ejemplo, muestran indiferencia al dolor o a la temperatura, una respuesta adversa a los sonidos o a las texturas específicas, olfateo o palpación excesiva, fascinación visual por las luces o el movimiento.
Síntomas raros o infrecuentes del autismo
En cuanto a los síntomas menos habituales o síntomas raros del autismo, son diversos los expertos que proponen algunos. Por ejemplo, en un estudio de Besag (2018) se habla de que las personas con autismo son más propensas a experimentar convulsiones.
Según Hughes et al. (2018), tienen más probabilidad también de manifestar síndrome de Savant (que implica unas habilidades extraordinarias en un área muy específica). Otros síntomas raros del autismo son la hiperlexia (capacidad para decodificar palabras sin entenderlas) y, según un estudio de Ward et al. (2017), la sinestesia (asociación de palabras o ideas con gustos, colores y sonidos).
Finalmente, pueden presentar lo siguiente:
- Bajo tono muscular.
- Dificultades en las habilidades motoras finas y gruesas.
Síntomas en niños y síntomas en niñas
Según el último estudio de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), la proporción de niños y niñas con autismo es de 5 a 1. Sin embargo, como las niñas encubren mejor sus síntomas, debido a sus habilidades sociales, podría haber muchos casos sin diagnosticar.
Tampoco se sabe con exactitud por qué el autismo se presenta más en niños que en niñas, pero es algo que también ocurre con otros trastornos del neurodesarrollo durante la infancia temprana. Por ejemplo, los trastornos del aprendizaje.
A grandes rasgos, podemos decir lo siguiente sobre las tendencias de diferencias entre niños y niñas con autismo:
- Las niñas presentan mejores habilidades sociales.
- Las niñas con TEA tienen más dificultades de aprendizaje y más problemas durante la escolarización.
- Tanto niños como niñas presentan obsesión con determinados temas, pero las niñas se fijan más en muñecos, dibujos y princesas.
- Los niños se obsesionan más en actividades menos habituales, como poner en fila bloques de construcciones.
- Las niñas muestran menos comportamientos repetitivos, como el aleteo o el mecerse sobre uno mismo.
- Las niñas son menos sensibles a las entradas sensoriales fuertes (tienen menos hipersensibilidad sensorial).
Comorbilidades y asociación con otras condiciones
El autismo suele aparecer con otras condiciones, síntomas y trastornos relacionados con la discapacidad intelectual, los trastornos de conducta o los trastornos del neurodesarrollo. Entre las condiciones comórbidas al autismo más frecuentes encontramos las siguientes:
- Discapacidad intelectual.
- Trastornos del lenguaje.
- Trastornos del sueño.
- TDAH (trastorno por déficit de atención con hiperactividad).
- Alteraciones o trastorno de conducta.
- Trastorno negativista desafiante.
- Depresión (trastorno depresivo).
- Trastorno bipolar.
- Trastornos de la alimentación.
- Tics.
- Trastornos de la eliminación (encopresis y enuresis).
- Síndrome de Tourette.
- Conductas autolesivas o agresividad.
¿Cuándo pedir ayuda si descubro síntomas de autismo?
Si tu hijo presenta algunos de los síntomas del autismo descritos, así como posibles signos de alerta (no mantiene el contacto visual, no responde a la sonrisa ni a otras expresiones faciales de los padres, no señala, no mira objetos que señalan los padres), valora la necesidad de pedir ayuda.
En estos casos, un diagnóstico temprano es la mejor manera de ayudar a tu hijo, porque se podrá iniciar una estimulación temprana y un tratamiento acorde. Por otro lado, pedir ayuda también permitirá descartar el diagnóstico de autismo cuando no se cumplan los criterios.
- American Psychiatric Association –APA- (2014). DSM-5. Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales. Madrid: Panamericana.
- Autismo Andalucía: Guía para la atención educativa a los alumnos y alumnas con Trastornos del Espectro Autista. Dirección General de Orientación Educativa y Solidaridad. Consejería de Educación y Ciencia.
- Besag FM. Epilepsy in patients with autism: links, risks and treatment challenges. Neuropsychiatr Dis Treat. 2018;14:1-10. doi:10.2147/NDT.S120509
- Centers for Disease Control and Prevention. Signs and Symptoms of Autism Spectrum Disorders. Updated August 27, 2019.
- GBD 2019 Diseases and Injuries Collaborators. Global burden of 369 diseases and injuries in 204 countries and territories, 1990–2019: a systematic analysis for the Global Burden of Disease Study 2019. The Lancet. 2020 Oct; 396 (10258): 1204-1222 (https://doi.org/10.1016/S0140-6736(20)30925-9)
- Hughes JEA, Ward J, Gruffydd E, et al. Savant syndrome has a distinct psychological profile in autism. Mol Autism. 2018;9:53. doi:10.1186/s13229-018-0237-1
- Málaga, I. et al. (2019). PREVALENCIA DE LOS TRASTORNOS DEL ESPECTRO AUTISTA EN NIÑOS EN ESTADOS UNIDOS, EUROPA Y ESPAÑA: COINCIDENCIAS Y DISCREPANCIAS. MEDICINA (Buenos Aires), 79 (Supl. I): 4-9
- Ward J, Hoadley C, Hughes JE, et al. Atypical sensory sensitivity as a shared feature between synaesthesia and autism. Sci Rep. 2017;7:41155. doi:10.1038/srep41155