El tiempo que permanece el alcohol en el organismo y sus efectos

¿Sabes por qué aparecen los efectos del alcohol, cómo se metaboliza y cuánto dura en tu organismo? Veámoslo de la mano de los científicos.

Revisado y aprobado por el médico Diego Pereira.

Escrito por Josberth Johan Benitez Colmenares

Última actualización: 27 marzo, 2023

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el consumo nocivo de alcohol es responsable del 5,1 % de la carga mundial de morbilidad. En promedio, se le atribuyen 3 millones de muertes todos los años. Su consumo afecta también a amigos, familiares, colegas y extraños. Repasamos los efectos del alcohol en el organismo y el tiempo que suele permanecer en el cuerpo.

En la mayoría de las sociedades el alcohol es un componente central de la socialización. De igual modo, suele relacionarse como un símbolo de estatus social y de modales refinados. La mayoría de las personas ignora los efectos del alcohol en el organismo, también la manera en que este se metaboliza. Obviando detalles técnicos hoy te enseñamos todo lo que debes saber al respecto.

¿Cuáles son los efectos del alcohol en el organismo?

Los efectos del alcohol en el organismo empiezan a ponerse en marcha desde el primer sorbo. Ten en cuenta que existen diferentes tipos de alcohol, aunque en concreto hoy nos concentramos en el alcohol etílico (etanol).

El alcohol se obtiene a través del proceso de fermentación, un mecanismo natural que convierte una fuente de azúcar (una fruta, un cereal y otros) en dióxido de carbono y alcohol etílico. Esto se hace con ayuda de bacterias.

El proceso de fermentación da como resultado bebidas como la cerveza, el vino o la sidra. Estas se conocen como bebidas fermentadas. Cuando dichas bebidas se exponen a un proceso de destilación; esto es, la separación de los distintos componentes de la mezcla, se obtienen bebidas como la ginebra, el wiski y el ron. Estas se conocen como bebidas destiladas. El grado alcohólico de las bebidas fermentadas es inferior al de las bebidas destiladas.

Los efectos del alcohol en el organismo se sienten en ambos tipos de bebidas, aunque debido a que en las destiladas la concentración de alcohol puro es mayor en estas se manifiestan más rápido. De manera general, las dosis bajas se relacionan con efectos estimulantes y las dosis altas con efectos depresivos. A pesar de ello, los expertos alertan que el alcohol no se cataloga como un estimulante sino como un depresor.

La razón de ello es que la clasificación de una sustancia no se hace con base en sus efectos inmediatos. Catalogar a las bebidas alcohólicas como un estimulante puede llevar a infravalorar sus verdaderos efectos. Con estas reflexiones como introducción te dejamos con los efectos a corto y medio plazo del alcohol en el organismo.

Efectos a corto plazo

El efecto inmediato de la ingesta de alcohol se siente en la comunicación entre neuronas. Rápidamente, recuerda que las neuronas son las células en el cerebro que transfieren información entre sí a través de lo que se conocen como neurotransmisores. El alcohol reduce el ritmo de la actividad cerebral. Entre otras cosas, lo hace por medio de los mecanismos siguientes:

• Reduce la función del receptor NMDA: esto es, el receptor del neurotransmisor de glutamato. El glutamato es el neurotransmisor excitador más abundante en el cerebro y su función es la de regular sistemas motores, sensitivos y cognitivos.
• Incrementa la actividad de los receptores GABA: se trata del neurotransmisor encargado de ralentizar la actividad cerebral. Además, está involucrado en el control motor, el sueño y la visión.

En síntesis, y durante los primeros tragos, el alcohol disminuye progresivamente la excitación e incrementa al mismo tiempo la inhibición. Es por esta razón que las bebidas alcohólicas son depresoras y no estimulantes. Otros neurotransmisores afectados son la dopamina y la serotonina, los cuales inciden en la coordinación, los movimientos, la motivación y el placer. Así, los efectos a corto plazo son los siguientes:

• Somnolencia o sensación de relajación.
• Habla lenta o arrastrada.
• Comportamientos impulsivos.
• Inhibiciones reducidas.
• Falta de coordinación.
• Problemas para concentrarse y tomar decisiones.
• Cambios en el humor.

La mayor parte del alcohol se metaboliza en el hígado. Allí, la enzima deshidrogenasa transforma el alcohol en acetaldehído, una toxina simpaticomimética que es responsable de la aparición de la resaca alcohólica y el rubor facial. El acetaldehído se metaboliza aún más por la enzima deshidrogenasa y pasa a convertirse en ácido acético. Finalmente, luego de una nueva metabolización, se transforma en dióxido de carbono y agua.

Efectos a medio plazo

A medida que la persona ingiere más alcohol el mecanismo descrito se potencia aún más. Los efectos pasan de ser tenues a ser más graves, tanto que resultan muy evidentes para la persona y para quienes la rodean. La rapidez con la cual aparecen depende de varios factores: el peso, la cantidad de grasa corporal, los fármacos que se hayan tomado anteriormente, los alimentos ingeridos y la tolerancia propia a las bebidas alcohólicas.

A propósito de esto último, alguien puede manifestar efectos intensos luego de una o dos copas; esto cuando no está habituado a beber (es abstemio, por ejemplo). Al margen de esto, los principales efectos del alcohol luego de minutos u horas son los siguientes:

• Aumento de la presión arterial (leve o moderada).
• Náuseas y vómitos.
• Euforia.
• Vértigo.
• Dolor de cabeza.
• Cambios en la visión, la audición y la percepción.
• Pérdida de la memoria o la cognición.
• Somnolencia extrema.
• Cambios bruscos en el humor.

Cuando se combina el consumo de alcohol con otras drogas que son depresoras del sistema nervioso central, como por ejemplo los opiáceos, las benzodiazepinas o los barbitúricos, los efectos se manifiestan con mayor rapidez. Si la ingesta se prolonga de manera permanente aparecen secuelas mas graves. Los expertos y los investigadores señalan a las siguientes como las principales:

• Síndrome amnésico.
• Intoxicación aguda por etanol (que puede llevar a un coma etílico).
• Trastorno psicótico residual y de inicio tardío.
• Desorden psicótico.
• Trastorno mental y del comportamiento no especificado.
• Degeneración del sistema nervioso.
• Miocardiopatía alcohólica.
• Gastritis alcohólica.
• Enfermedad hepática e insuficiencia hepática alcohólica.
• Cirrosis hepática alcohólica.
• Pancreatitis aguda y crónica inducida por alcohol.
• Polineuropatía alcohólica.
• Miopatía alcohólica.
• Hígado graso alcohólico.
• Hepatitis alcohólica.
• Fibrosis alcohólica y esclerosis del hígado.

¿Cuánto tiempo permanece el alcohol en el organismo?

Ya hemos reseñado los efectos del alcohol en el organismo, también el proceso mediante el cual se metaboliza. Ahora haremos lo propio con el tiempo durante el cual la sustancia permanece en el organismo. Lo primero que tienes que saber es que el alcohol se distribuye en el agua corporal. Como ya explicamos, la concentración de alcohol en la sangre (BAC, por sus siglas en inglés) depende del peso del sujeto y otras variables.

El BAC se expresa en la sangre por medio de gramos por decilitro (g/dL). La cantidad de gramos por decilitro que tiene una persona condiciona la manifestación de los efectos. Estrictamente, el alcohol se excreta de manera diferente al metabolizarse.

Por ejemplo, en la sangre puede permanecer hasta 12 horas después de su ingesta y en la orina hasta 5 días. Como curiosidad, mediante una prueba de drogas del folículo piloso se puede detectar alcohol hasta 90 días después de su ingesta.

Por supuesto, los efectos más potentes del alcohol se sienten durante las primeras horas. Estos se van reduciendo de manera progresiva. Para concluir, ten en cuenta que el alcohol se diluye con los alimentos, de manera que afectará más a aquellos con el estómago vacío (hasta 3 veces más rápido). Un estómago lleno también retrasa la derivación del alcohol hacia el intestino delgado.