8 hábitos de higiene íntima muy recomendables
La higiene íntima es un tema que preocupa a muchas mujeres. El olor, los ciclos menstruales, tener relaciones sexuales, incluso los días calurosos, son de los tantos factores que inquietan cuando se alcanza la madurez, al siempre intentar evitar posibles incomodidades e infecciones.
Por años se ha creído que la vagina es la zona más sucia del cuerpo, aunque esto no es cierto. Muchas mujeres tienden a tener hábitos de limpieza exagerados en el área debajo del cinturón por su mala reputación. Descubre los 8 hábitos de higiene íntima más recomendados.
Hábitos recomendados para la higiene íntima
A pesar de que las vulvas no son como las huellas dactilares, cada una es diferente e incluso el olor es distinto en cada mujer. Hay hábitos de higiene que todas pueden seguir para procurar una buena salud íntima.
1. Lavar solo la zona exterior
No es necesario lavar la vagina, pero si asear la vulva. Entendiendo que la vagina es el canal interno que conecta con el cuello uterino, mientras que la vulva es el área externa, cuyas partes están representadas por labios internos y externos, clítoris y capucha del clítoris.
Debes confiar que tu vagina se limpia por sí sola, porque en realidad lo hace. De acuerdo a lo señalado por el Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos, la vagina mantiene un correcto equilibrio de pH y, con ayuda de las secreciones, se asea de forma natural.
Gracias a que la vagina posee bacterias consideradas buenas, permite que el pH esté en equilibrio con una sustancia ácida. Dicha acidez impide que las bacterias malas infecten el lugar. Limpiar la vagina interrumpe su capacidad para limpiarse por sí misma y se rompe el equilibrio bacteriano.
2. Lavado correcto de la vulva
Asea la vulva con agua tibia o templada y, aunque no es necesario utilizar jabón, puedes aplicar un poco. Lava siempre de adelante hacia atrás, limpia con delicadeza alrededor de los pliegues, separando los labios y alrededor del clítoris para eliminar residuos. Recuerda evitar que entre jabón o agua a la vagina.
Es un error lavarse empezando por el ano hasta llegar a la vulva, ya que puedes llevar bacterias que se hallan en ese lugar a la vagina y causar infección. Ahora, si te estás preguntando por qué no es necesario usar jabón, según la Clínica Mayo es innecesario. La vulva queda limpia sin jabón; lo que debes procurar es que la zona quede libre de residuos.
Incluso se recomienda, en caso de usarlo, que no sea jabón perfumado. Este puede irritar la piel y causar incomodidad. Si deseas usarlo, utiliza uno que no tenga aroma, sea incoloro y suave.
3. No utilices aerosoles
Esto es categórico: no uses aerosoles. Aunque los supermercados tengan una sección abarrotada de estos productos, lo cierto es que son innecesarios y dañinos. ¿Por qué los venden? En definitiva, fueron diseñados para aprovecharse de las inseguridades, bajo el falso mito que para combatir el olor vaginal se requiere de fragancias.
Lo cierto es que debes dejar tu olor natural de vagina, aunque te parezca irreal lo que lees. Debes aceptar que ese olor no tiene en absoluto nada de malo. Solo una persona que se encuentre muy cerca de la zona podrá olerlo; tu pareja, por ejemplo, y no debes temer o avergonzarte.
Aunque hay una gran variedad de posibles olores vaginales, asumiendo que cada mujer tiene uno particular, también depende de la alimentación y el ciclo menstrual. Esto no pasa de estar entre un olor a cobre a un olor dulce.
Si llegases a presentar un olor desagradable o a acre, comunícate con tu médico. No cometas el error de querer disfrazar el olor con jabones perfumados, ya que puedes presentar una posible infección y debes tratarte. Tampoco es necesario usar productos perfumados cuando tengas el periodo; debes asearte de la misma forma.
4. Usa ropa interior de algodón
La mejor tela es la de algodón. Aparte de su suavidad, tiene propiedades de absorción que permiten evaporar la humedad mucho más rápido.
De esta forma, obtienes mayor ventilación en esa zona, manteniéndola fresca y seca. Otras de las ventajas de usar ropa interior de algodón es que se evitan rozaduras y previene alergias en la piel.
5. Mantén tu vello púbico
El vello púbico protege a la vulva de bacterias, virus y levaduras que a larga causan infecciones. Además de cuidarte de rozaduras y del sudor. Dichas ventajas son la razón por la que eliminar por completo el vello púbico es una mala idea.
¿Qué puedes hacer? Lo siguiente:
- Quitar el vello a lo largo de la línea del traje de baño. Puedes usar una tijera o elegir el método de depilación menos invasivo.
- Si usas afeitadora o rasuradora, renueva sus hojas después de cada afeitada.
- Usa cremas o geles naturales. Son menos propensos a que sufras alergias.
6. Orina después del coito
No es necesario decir que debes practicar sexo seguro. Contando con esto, un hábito que debes tener es orinar después del coito. Esto reduce la probabilidad de contraer infección del tracto urinario. Otro hábito a tener es lavar la vulva después del sexo.
7. Sustituye la toalla sanitaria
Si eres de las que usan toallas de tela, asegúrate de lavarla bien y que no queden residuos del periodo anterior. Por otro lado, si usas las toallas desechables, evita pasar más de 5 horas con ella.
El usar por tanto tiempo una toalla sanitaria, al igual que emplear paños mal lavados, aumenta la probabilidad de sufrir erupciones cutáneas, mal olor e infecciones.
8. Considera dormir sin ropa interior
Cada vez más mujeres aceptan que dormir sin ropa interior es placentero y esto se debe a que la vagina está libre. Incluso, resulta más saludable que si duermes con ropa íntima, porque permite que tus genitales respiren.
Un estudio reveló que las temperaturas frías son excelentes para el bienestar de la vagina. Si nunca te has atrevido, quizás sea hora de intentarlo. Te hará sentir un increíble aire de libertad.
¿Cuándo debes visitar a tu médico?
Aparte de ir a tu chequeos programados, debes acudir al médico o ginecólogo si presentas algunos de estos problemas:
- Un olor fuerte y desagradable en el área debajo del cinturón.
- Frecuente comezón vaginal.
- Dolor al orinar, al tener el coito o masturbarse.
- Sangrado vaginal más de lo normal o inexplicable.
- Secreción muy espesa o de color amarilla, verde o gris.
- Verrugas, ampollas o llagas alrededor de la vulva.
¿Qué recordar sobre la higiene íntima?
No debes usar las duchas vaginales, salvo recomendación médica. Estas son dañinas para la salud de tu vagina y, aunque pueda que disfrutes las fragancias a jazmín o rosa primaveral, no uses jabones perfumados.
Antes de usar un producto toma el tiempo necesario para leer los ingredientes, ya sea lubricantes, jabones o crema para afeitar. La forma adecuada para lavar la vulva es de adelante hacia atrás; si lo haces de forma contraria llevarás las bacterias que se encuentran en tu ano a la vagina.
Provee comodidad con ropa suave, ligera y fácil de transpirar. Evita usar ropa íntima fabricada con nylon o telas sintéticas, ya que pueden irritar la piel.
Debes aceptar el olor natural de la vagina; no hay nada de malo con ello. Si presentas un olor desagradable debes acudir al médico y no disfrazarlo o usar aerosoles. Esto aumentará la infección, en caso de tenerla.
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