Ranitidina: ¿qué es y para qué sirve?

La ranitidina es un medicamento polémico. En algunos países incluso está prohibida su venta. Descubre más sobre este, para qué sirve, cuáles son sus efectos secundarios y por qué se restringió su uso.
Ranitidina: ¿qué es y para qué sirve?
Diego Pereira

Revisado y aprobado por el médico Diego Pereira.

Escrito por Daniela Andarcia

Última actualización: 25 mayo, 2021

La ranitidina es un fármaco disponible en diferentes presentaciones. En general, tiene una de venta libre y otra con receta. Se usa para tratar diversas afecciones como las úlceras del estómago o cuando se produce un nivel de acidez elevado.

Su principio activo es conocido por el mismo nombre, ranitidina. En la actualidad, algunos países han prohibido la venta de este medicamento debido a que se han encontrado niveles inadmisibles de NDMA, un químico que es posible sea cancerígeno.

Zantac es la marca que produce la ranitidina en tableta oral, aunque se puede hallar en el mercado como medicamento genérico. Te mostramos todo lo relacionado a la ranitidina.

¿Para qué se usa?

Ranitidina para el reflujo
Este medicamento permite disminuir la acidez estomacal, y por lo tanto también los efectos del reflujo gastroesofágico.

La ranitidina se usa para tratar diversas afecciones como:

Con frecuencia se receta este medicamento para ser ingerido a corto plazo, todo depende de la afección que puedas presentar.

¿Cómo se administra?

Es posible que el médico evalúe algunos aspectos antes de indicar la dosis, la frecuencia y la presentación de la ranitidina al paciente. Estos pueden ser los siguientes:

  • Tipo de afección.
  • Edad.
  • Gravedad de la enfermedad.
  • Reacción al medicamento.
  • Padecimiento de otras condiciones médicas.

Presentaciones de la ranitidina

Es posible que la ranitidina genérica y de la marca Zantac se encuentre en tableta oral de 150 a 300 miligramos. Por otro lado, este fármaco también se puede encontrar en cápsula y jarabe para ser ingerido de forma oral o en solución inyectable.

Dosis

Recuerda que la dosis puede variar dependiendo de la afección. Por lo general, cuando el tratamiento es indicado a un adulto de 17 a 64 años de edad, es posible que le receten 150 miligramos, dos veces al día, o 300 miligramos para ingerir solo una vez cada 24 horas. Algunos médicos suelen recomendarlo antes de ir a la cama o después de la cena.

Para bebés con menos de un mes de nacidos no es seguro. Sin embargo, a partir del primer mes hasta los 16 años, el doctor podría recetar la dosis de 2 a 4 miligramos, dos veces al día, y dependiendo del peso corporal. No se puede exceder la dosis de 300 miligramos por día.

No es recomendable para personas mayores de 65 años, ya a que es posible que cause alucinaciones y delirios, así como otros efectos secundarios. Si lo requiere, es posible que el especialista le recomiende una dosis bastante baja.

¿Quién no debe tomarlo?

Puede que la ranitidina no sea segura para algunas personas, en caso de tener algunas de estas afecciones o condiciones, infórmale a tu médico.

  • Diabetes.
  • Una dieta baja en calcio o sal.
  • Afecciones renales.
  • Fenilcetonuria.
  • Alergia a la ranitidina.

A los bebés con menos de un mes de nacidos no se les debe suministrar ranitidina. Existe evidencia científica de que esto puede hacerlos más propensos a desarrollar infecciones e incluso aumentar la probabilidad de muerte. Sin embargo, aún se requiere más investigación al respecto.

¿Cuáles son los posibles efectos secundarios?

Efectos secundarios de la ranitidina, como la cefalea
Los efectos adversos de este fármaco son variados, pero en general son leves.

Los efectos de la tableta oral de ranitidina podrían dividirse en dos, los comunes y aquellos efectos secundarios considerados graves.

Efectos secundarios comunes

Toma en cuenta que si estos efectos no desaparecen en unos pocos días debes acudir al médico.

Efectos secundario graves de la ranitidina

Si notas algunos de estos síntomas, debes acudir de inmediato al médico:

  • Orina oscura.
  • Fuerte dolor de estómago.
  • La piel se torna amarilla.
  • Confusión, cansancio o agitación.
  • Problemas de visión.
  • Alucinaciones.
  • Taquicardia.
  • Dificultad para respirar.

Si te percatas de cualquier otro inconveniente, visita al doctor con prontitud. Asimismo, es posible que en esta lista no se encuentren todos los efectos secundarios, debido a que cada persona podría presentar signos diferentes.

¿Qué sucede si olvido una dosis?

Como hemos visto, este medicamento no es seguro, por lo que la recomendación es que visites a un especialista para suspender su uso y comenzar con un fármaco alternativo.

¿Cómo debo actuar en caso de una sobredosis de ranitidina?

Llama a emergencias o visita el centro de salud más cercano.

¿Cómo almacenar o desechar este medicamento?

Cuando se trata de medicamentos, hay algunos principios básicos. Lo primero es que conserves las pastillas en su envase original y, en este caso, en un lugar fresco.

Por otro lado, al momento de desecharlo considera no tirarlo por el inodoro. Puedes arrojarlo por la basura, siempre que lo mezcles con algo que haga imposible su consumo, o llevarlo a una farmacia.

Ranitidina, un fármaco prohibido en algunos países

Aunque aún está bajo investigación, la ranitidina puede aumentar la probabilidad de desarrollar ciertas enfermedades, por ello algunos países han prohibido su venta. Este fármaco se usa para tratar úlceras estomacales o intestinales, con el fin de erradicarlas y evitar que se produzcan otra vez.

Recuerda no consumir este fármaco con otro medicamento, puede alterarlo y causar efectos secundarios graves. Consulta con tu médico y suspende el uso si notas problemas de visión, dolores estomacales fuertes, entre otras afecciones.

Finalmente, ten en cuenta que este artículo es de carácter informativo y no sustituye la visita o consulta de un médico. Evita la automedicación y solo ingiere aquellos fármacos aprobados por tu especialista de confianza.




Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.