Las 10 enfermedades de los huesos más comunes

Las enfermedades de los huesos son muy comunes en la población general, sobre todo en una sociedad en la que la población cada vez está más envejecida. Conoce con nosotros las patologías más representativas de este grupo.
Las 10 enfermedades de los huesos más comunes
Samuel Antonio Sánchez Amador

Escrito y verificado por el biólogo Samuel Antonio Sánchez Amador.

Última actualización: 22 septiembre, 2021

El aparato locomotor está formado por el sistema osteoarticular (huesos, articulaciones y ligamentos) y el sistema muscular (músculos y tendones). Gracias a él, somos capaces de relacionarnos con el entorno de forma inmediata, ya que podemos movernos en el espacio tridimensional y responder a los estímulos ambientales. Por desgracia, existen ciertas enfermedades de los huesos comunes que dificultan su funcionamiento.

Los trastornos musculoesqueléticos son comunes y afectan a millones de personas en todo el mundo. En esta oportunidad, te mostramos las 10 enfermedades de los huesos más comunes y cómo detectarlas antes de que cronifiquen. No te lo pierdas.

¿Cuáles son las enfermedades de los huesos más comunes?

Los huesos tienen múltiples usos en el organismo humano: son el soporte de los tejidos blandos, protegen a los órganos internos, nos permiten movernos y son un excelente reservorio de nutrientes. Sin ir más lejos, el cuerpo de un adulto contiene de forma aproximada 1 kilogramo de calcio y el 99 % se encuentra localizado en la estructura ósea.

De todas formas, existen diversas enfermedades que pueden trastocar la funcionalidad de los huesos y la capacidad para realizar los movimientos. La Organización Mundial de la Salud (OMS) engloba a este grupo de patologías dentro de los trastornos musculoesqueléticos y nos brinda los siguientes datos globales:

  • De forma aproximada, 1710 millones de personas tienen trastornos musculoesqueléticos en todo el mundo. Más de 150 enfermedades afectan al sistema locomotor, ya sean musculares, óseas o ambas.
  • Entre todas estas condiciones, el dolor lumbar o lumbago es el más frecuente. Esta patología afecta a 568 millones de personas y es la causa principal de discapacidad en 160 países.
  • Estos trastornos limitan la movilidad y la capacidad para realizar actividades diarias. Por ello, son unas de las causas más importantes de falta de bienestar y jubilaciones anticipadas.
  • La prevalencia de estas condiciones va en aumento y se prevé que siga al alza. Esto se debe, sobre todo, a que la población cada vez está más envejecida.

Con estos datos, nos hacemos una idea de lo serios que son los trastornos musculoesqueléticos a nivel global. A continuación, te presentamos las 10 enfermedades de los huesos más comunes y cómo detectarlas a tiempo. ¡Sigue leyendo!

1. Dolor lumbar o lumbago

Las enfermedades de los huesos más comunes incluyen el lumbago
El dolor lumbar es bastante común, y suele asociarse con gran cantidad de patologías. Sin embargo, en una proporción importante de pacientes no hay una causa específica.

Como hemos dicho en líneas previas, el lumbago afecta a más de 560 millones de habitantes en todo el mundo. Este se define como un dolor reumático fuerte que afecta a los huesos y músculos de la parte lumbar de la espalda. Según estudios, el 84 % de la población mundial presentará al menos 1 episodio de lumbalgia a lo largo de su vida.

Aunque no se trate de una condición de los huesos como tal, cabe destacar que afecta a los ligamentos de la espalda, lo cual sí que se considera parte del sistema osteoarticular. Esta condición suele derivar en espasmos musculares y distensión o desgarro en la zona lumbar, aunque es difícil encontrar una causa concreta. Más de el 90 % de cuadros son idiopáticos (no hay un desencadenante claro).

El lumbago agudo puede extenderse por varias semanas, pero no se considera crónico hasta que supera la barrera sintomática de 3 meses.

2. Osteoporosis

La Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos define a la osteoporosis como una enfermedad que adelgaza y debilita a los huesos. En los pacientes que tienen esta condición, las estructuras óseas se vuelven frágiles y se quiebran fácilmente, lo cual favorece la ruptura de soportes vitales durante caídas y accidentes. 

La incidencia anual de esta condición se calcula en 1 % en las mujeres de 65 años, en 2 % en las de 75 y en 3 % en las mayores de 85 años. Por otro lado, se estima que en Estados Unidos 10 millones de habitantes manifiestan esta condición, mientras que otros 34 millones están en riesgo. Todos estos datos convierten a la osteoporosis en una de las enfermedades de los huesos más comunes.

El bajo consumo de calcio es un desencadenante muy importante de la osteoporosis: si el cuerpo no tiene suficiente cantidad de este mineral, recurre a destruir el hueso para obtenerlo. Los desequilibrios hormonales durante la menopausia también son sospechosos principales, y por ello, es mucho más común en mujeres (el doble que en varones).

Según la OMS, la prevalencia de esta condición llega a alcanzar al 30 % de las mujeres caucásicas ancianas.

3. Fracturas por sobrecarga

Las fracturas por sobrecarga son pequeñas grietas en los huesos. Su causa radica en la aplicación de fuerza/esfuerzo en una parte concreta del cuerpo, lo cual suele derivar de la práctica de ejercicio o de ciertos puestos en el ámbito laboral. De todas formas, algunas enfermedades (como la osteoporosis) también pueden favorecer su aparición.

Este tipo de lesiones son mucho más comunes en las extremidades inferiores, pues estas soportan el peso de todo el cuerpo. El síntoma más común es la aparición de sensibilidad en una zona (sobre todo los pies) que disminuye durante el reposo y se agrava con el ejercicio físico.

La incidencia de esta condición llega al 6 % en algunos grupos específicos, como deportistas o trabajadores con mucha carga física.

4. Osteoartritis

La osteoartritis es la forma más común de cuadro artrítico, pero no debe confundirse con la artritis reumatoide, la gota, la espondilitis anquilosante y otras condiciones que afectan a las articulaciones. A diferencia de otras de estas patologías, esta condición se suele atribuir al paso del tiempo y a la degradación natural del cartílago.

En este cuadro, el cartílago de las articulaciones se va dañando por el estrés mecánico al moverse y esforzarse y al final es incapaz de alcanzar su funcionalidad inicial. Esto puede desencadenarse por muchos eventos: malformaciones óseas congénitas, sobrepeso, daños en los nervios periféricos y falta de coordinación en el movimiento y pérdida de fuerza muscular, entre otros.

Se estima que más de 250 millones de personas (el 3,6 % de la población mundial) tienen osteoartritis en la rodilla, mientras que el mismo cuadro en la cadera afecta al 0,85 % de los habitantes de la Tierra. Tal y como indican estudios, esta condición se asocia de forma inherente a la vejez y el 80 % de personas mayores de 65 años tienen indicios de ella aunque no presenten síntomas.

Como la población cada vez está más envejecida, la prevalencia de esta condición aumenta. Es una de las enfermedades de los huesos más comunes. 

5. Artritis reumatoide

La artritis reumatoide se manifiesta con dolor e inflamación en las articulaciones y huesos adyacentes (como todos los cuadros de este tipo), pero presenta bastantes diferencias respecto a la osteoartritis descrita. En esta enfermedad, el sistema inmunitario ataca al revestimiento de la cápsula articular, lo cual genera inflamación y destrucción del cartílago.

Con el tiempo, la erosión ósea inmunomediada provoca una deformidad en las articulaciones, lo cual le otorga a los pacientes los conocidos “dedos en garfio”. Es bastante más grave que la osteoartritis, ya que también puede generar daños en otras partes del cuerpo (enfermedades pulmonares, linfomas, síntomas oculares y más).

La prevalencia de la artritis reumatoide oscila entre el 0,3 y el 1,2 % de la población. También es más común en gente mayor, pero sus cifras son menores a las de la osteoartritis.

6. Escoliosis

La escoliosis es una de las enfermedades de los huesos más comunes en todo el mundo, pero poca gente conoce su naturaleza. La Clínica Mayo define esta condición como una ‘curvatura lateral de la columna vertebral que ocurre con mayor frecuencia durante el periodo de crecimiento anterior a la pubertad’. El 3 % de la población joven padece esta patología aunque no lo sepa.

Se estima que el 65 % de los cuadros de escoliosis son idiopáticos, es decir, no tienen una causa exacta. El 15 % son de naturaleza congénita y el 10 % restante responde a una enfermedad neuromuscular diagnosticada, como la polimiositis o la rabdomiolisis.

A pesar de que parezca solo una condición ósea, la desviación de la columna puede provocar constipaciones intestinales, dolor en el tronco, dificultades respiratorias y cardíacas y limitación del movimiento. La gravedad de los síntomas depende de la curvatura de la columna y esta también determina el posible tratamiento.

La escoliosis afecta a un 2-3 % de la población mundial. La prevalencia es igual en hombres y mujeres y la edad de presentación media es de 10-15 años. 

7. Cáncer de hueso

El cáncer de origen óseo es raro, pero hay que nombrarlo en cada lista en la que se recojan las enfermedades más comunes de los huesos. De todas formas, es necesario destacar que este grupo de neoplasias solo hacen referencia a los tumores que se originan de forma primaria en el tejido óseo. Los cánceres que han metastatizado al esqueleto no cuentan, ya que son extensiones secundarias de otros tumores.

Tal y como indica el portal US News Health, este tipo de cánceres representan menos del 1 % de todas las neoplasias diagnosticadas cada año. Aun así, se estima que en Estados Unidos se descubren unos 3600 casos y mueren 2000 personas por este tipo de cuadros al año. La tasa de supervivencia de todas las etapas y tipos combinados 5 años después del diagnóstico se sitúa en un 78 %.

La extirpación del tumor óseo mediante cirugía siempre es el primer paso. A veces es necesaria la amputación de la extremidad entera afectada.

8. Infección ósea (osteomielitis)

Entre las enfermedades de los huesos más comunes está la osteomielitis
La osteomielitis puede convertirse en una condición duradera y difícil de tratar. En ocasiones, la hospitalización para cumplir tratamiento antibiótico endovenoso es importante.

La infección de los huesos es un cuadro difícil de tratar que requiere atención médica a largo plazo. Estos cuadros son generalmente provocados por ciertas bacterias (estafilococos), pero los hongos también son capaces de causarlos. Los patógenos llegan al tejido óseo por el torrente sanguíneo, entrando por lesiones o a través de material contaminado durante una cirugía.

Los síntomas más comunes de una infección en los huesos son fiebre, inflamación, enrojecimiento, calor al tacto, dolor en la zona de infección y fatiga generalizada. Suele ser necesario drenar la zona infectada y, a veces, se debe de extraer tejido óseo que se ha dañado de forma irreversible. Una vez se detecta el patógeno causal, se inicia un tratamiento antibiótico con 6 semanas de duración media.

9. Estenosis espinal

Esta es otra de las enfermedades de los huesos más comunes que se centran en la columna vertebral, tal y como sucede con la escoliosis y el lumbago. En este caso, el canal espinal (que protege y permite el paso a la médula espinal) reduce su diámetro, lo cual provoca el pinzamiento de los nervios del tronco. Los síntomas son de instauración lenta y mejoran al inclinarse hacia delante.

Las causas de esta patología son múltiples: osteoartritis, artritis reumatoide, tumores espinales, traumas mecánicos y muchas más. Debido a su etiología múltiple y a la fragilidad de la columna vertebral, se estima que la estenosis espinal está presente hasta en un 8 % de la población mundial.

El síntoma más común es el dolor al permanecer de pie (en un 94 % de los casos), pero esta condición también se presenta con malestar en brazos, manos y codos, síntomas bilaterales, sensación de extremidades “dormidas” y falta de coordinación motriz. Todo depende del lugar en el que se produzca el pinzamiento nervioso y de la gravedad de cada cuadro.

10. Gota

Esta es otra de las enfermedades de los huesos más comunes que se engloba con los trastornos de tipo artrítico. A nivel mundial, la prevalencia reportada de esta patología va del 0,1 hasta el 10 % de la población general, siendo siempre mayor al 1 % en los países de alto ingreso (sobre todo Europa y América del Norte).

La incidencia y la prevalencia de la gota aumentan con la edad, afectando hasta al 13 % de las personas mayores de 80 años. En más de la mitad de los casos, la estructura ósea más afectada es la articulación de la base del dedo gordo del pie. Esto provoca un dolor muy localizado, hinchazón y dificultad para pisar el suelo sin sentir dolor.

A diferencia de la artritis reumatoide y la osteoartritis, la gota se produce por unos niveles demasiado altos de ácido úrico en la sangre. Estos se depositan en forma de cristales en las articulaciones, tendones y anexos óseos, lo cual provoca la sintomatología citada. Una mala dieta, los problemas de salud previos y la predisposición genética son los principales sospechosos.

La artritis reumatoide es de origen autoinmunitario, la osteoartritis sucede por el paso del tiempo y la gota se presenta por acumulación de cristales de ácido úrico en las articulaciones.

Las enfermedades de los huesos más comunes y su importancia

Como ves, pocas de las patologías aquí citadas se circunscriben solo a los huesos en sí. Las infecciones óseas, el cáncer de hueso y las fracturas por sobrecarga son patologías que ocurren en el tejido óseo per se, pero la mayoría de las enfermedades de esta lista también afectan a las articulaciones y los cartílagos.

Junto con el lumbago, los cuadros artríticos podrían considerarse como los trastornos musculoesqueléticos más comunes en todo el mundo. Al fin y al cabo, la degradación de las articulaciones conlleva el rozamiento entre huesos, y por tanto, también se manifiesta de forma esquelética. Al fin y al cabo, una enfermedad “de los huesos” será toda aquella que afecte al sistema esquelético.




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