6 tipos de granos en la cara y cómo tratarlos

Conocer los tipos de granos en la cara es importante para poder darles un tratamiento adecuado y evitar mayores afectaciones en esta zona tan delicada.
6 tipos de granos en la cara y cómo tratarlos

Última actualización: 06 marzo, 2021

Muchas personas no distinguen los distintos tipos de granos en la cara y suelen darle el mismo tratamiento a todos para deshacerse de ellos. Sin embargo la mayoría de las veces lo que se logra es empeorar su aspecto o dañar la piel hasta dejar cicatrices.

Los granos, aunque molestos y motivo de vergüenza para algunos, suelen ser el reflejo de alguna condición de salud. Por lo general se les relacionan con cambios hormonales como sucede en la adolescencia o el embarazo. También influye en su aparición temas tan importantes como la alimentación.

Por otro lado estas lesiones también suelen aparecer en pacientes con condiciones específicas. Por ejemplo, un estudio de la East Carolina University dejó en manifiesto la relación entre algunas dermopatías con producción de granos y la enfermedad renal crónica.

¿Qué son los granos en la cara?

El término “grano” es utilizado para hacer referencia a cualquier lesión elevada en la piel. Desde un punto de vista médico cada una de estas lesiones reciben un nombre específico según su aspecto y mecanismo de aparición.

Estos granos pueden ser producto de la obstrucción de estructuras cutáneas microscópicas como el aparato pilosebáceo. En el caso de que exista una infección asociada suelen haber signos de inflamación como enrojecimiento local y presencia de pus.

El acné es un ejemplo de enfermedad cutánea en la que existen múltiples granos. En un paciente con acné vulgar pueden observarse puntos negros y pústulas, que son algunos de los “granos” que te describiremos más adelante.

Los 6 tipos de granos en la cara y cómo tratarlos

Ahora que está claro qué son y por qué aparecen, vamos a definir los diferentes tipos de granos que pueden presentarse y cómo pueden tratarse sin causar mayores afectaciones. De todas maneras, lo recomendado es consultar a un dermatólogo cuando se observa que la situación se sale de control.

1. Puntos negros

Siendo los más comunes, los puntos negros se presentan por una obstrucción de los poros por exceso de piel muerta. Hay una falsa creencia sobre su color ya que se suele atribuir a la retención de mugre en los poros. En realidad, este color aparece debido al contacto entre la grasa de la piel y el aire.

Suelen aparecer en su mayoría en la nariz, ya que en esta zona se acumula gran cantidad de grasa.

¿Cómo tratarlos?

Hay una serie de productos ideales para mantener limpia la cara y evitar la acumulación de grasa. Lo ideal es usar uno que corresponda a nuestro tipo de piel. Como los puntos negros suelen arraigarse mucho, ayudará la exfoliación facial una vez por semana.

Asimismo un estudio sobre el acné señala que también pueden usarse métodos de extracción si los poros están muy cerrados e impiden la eliminación de los puntos negros.

2. Puntos rojos o pápulas

Los granos en la cara pueden ser muy molestos.
Es importante no realizar manipulación manual de ninguno de los granos que salgan en la cara, por más molestos que sean.

También son comunes y como su nombre lo indica son aquellos granos de color rojo. Suelen aparecer debido a problemas hormonales, consumo de alimentos altos en carbohidratos, cuadros de estrés, ansiedad, depresión o insomnio.

Estas pápulas pueden ser el resultado de la infección de los puntos negros que, al inflamarse, toman este color y crecen causando un poco de dolor. Para evitar una mayor infección es importante evitar tocarse el grano o tratar de reventarlo con la manos sucias.

¿Cómo tratarlos?

Una de las alternativas para tratar los puntos rojos de raíz es mejorar la alimentación y evitar el consumo de abundantes carbohidratos. Por otro lado es importante mantener el rostro limpio, para lo cual puede usarse un producto suave que no maltrate la superficie de la piel como el agua micelar.

Este producto, según la American Academy of Dermatology no irrita pieles sensibles debido a su bajo nivel de tensioactivo no iónico.

3. Puntos blancos

Los puntos blancos o espinillas aparecen debido a la acumulación de grasa y células muertas en el folículo piloso, impidiendo que este se abra.

Al no poderse drenar este material, los granos blancos se llenan de pus e inflaman debido a la acción bacteriana. Aquí es cuando pueden convertirse en pústulas. En ese momento su aspecto puede cambiar apareciendo un círculo rojo alrededor.

¿Cómo tratarlos?

En caso de que exista una infección lo ideal es la aplicación de antimicrobianos tópicos, siempre recetados por el dermatólogo. El uso de jabones con pH neutro o con características específicas para el tipo de piel del paciente también podría ayudar a contener este tipo de granos.

Lo que nunca se debe hacer es reventar los puntos con las uñas, ganchos o elementos que no son de uso profesional.

4. Milium

Los milium son unos granos pequeños de color blanco o amarillo claro que suelen tener entre 1 y 3 milímetros de diámetro. Se producen por una acumulación de queratina que obstruye los poros. A diferencia de los puntos blancos estas lesiones no duelen ni se infectan.

Suelen presentarse en la zona periocular, es decir, alrededor de los ojos. También aparecen en los pómulos, las orejas y los brazos. No hay una causa específica que permita explicar su aparición, pero entre las posibilidades están el acné y la sobreexposición solar.

¿Cómo tratarlos?

Como en anteriores casos se recomienda no tocar los milium ni tratar de apretarlos, pues solo conseguiremos una herida y posibles cicatrices. El mejor tratamiento es usar productos que fomenten la respiración de la piel.

Puede ser beneficioso un peeling superficial y evitar el uso de cremas grasas o maquillajes muy densos. También se debe cuidar la piel con un bloqueador solar.

5. Quistes

Hablamos de quistes para referirnos a aquellos granos que acumulan grasa en el interior de la piel, se ven como bultos que no siempre tienen un aparente punto de salida. Suelen ser dolorosos y al tacto se sienten duros.

Debido a la complejidad de la materia que hay dentro, se puede presentar algo de inflamación. De hecho hay un tipo de acné que se conoce como acné quístico o noduloquístico.

¿Cómo tratarlos?

En este caso siempre es ideal consultar el tratamiento a seguir con un dermatólogo. Por lo general suelen recetarse antibióticos tópicos, productos con peróxido de benzoílo o ácido salicílico. En ocasiones estas lesiones podrían requerir una cirugía menor.

6. Forúnculos

Los granos en la cara pueden infectarse.
Cuando los granos se infectan, la bacteria responsable suele ser Staphylococcus aureus.

Suelen ser muy dolorosos y generar pus, pues se producen a causa de la infección e inflamación de los forúnculos del vello. En algunas ocasiones se queda el vello enquistado bajo la piel y por ello se produce la infección, que puede deberse a la bacteria Staphylococcus aureus.

¿Cómo tratarlos?

Lo ideal es dejar que haya un drenaje natural y para ello puedes usar compresas calientes. Por lo general el médico indica antibióticos.

Granos en la cara: tratamientos a la medida

Como lo mencionamos, hay una forma específica de tratar cada uno de los tipos de granos en la cara, pero lo ideal es siempre consultar con un profesional, así evitamos lastimar la piel, estimular la proliferación de bacterias y promover un mayor grado de acné.

De igual forma, es fundamental conocer el tipo de piel que tienes para que puedas usar productos de limpieza y cuidado a la medida, los cuales podrían evitar que tu problema cutáneo empeore.




Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.